Cap. V

100 9 0
                                    

.
"Todo sucedía tan rápido y tus sonrisas, tus besos y tus caricias me acercaban cada vez más a ti, me enamoraban cada día más. Sólo agradezco que el destino me haya unido a tí de ésta manera. Sólo esperaba que tú también lo sintieras así, que te enamoraras de mí"

.

.

.

Max

¿Que era esto?... Justamente ahora.

Cerré los ojos y comencé a disfrutar del movimiento de sus labios sobre los míos, Tul me sorprendía así, de ésta manera, ¿Que más podría hacer?. Sus brazos comenzaron a perder su fuerza alrededor de mí, y mi corazón latía fuertemente dentro de mi pecho, mientras mi piel, mi piel comenzaba a arder, y cada segundo un poco más y más. Tul estaba besándome ahora, sentía la suavidad de sus labios en los míos. Extrañamente siendo un hombre sus labios eran tan suaves, aunque... No podria compararlos, en toda mi vida sólo había besado a un sólo hombre, a uno sólo... a Yu


Enseguida me aparté de él, empujandolo fuerte lejos de mí

-Lo... lo siento- dije nervioso -Esto no está bien- dije a Tul viéndolo a los ojos -Definitivamente no está bien-

-¿A qué te refieres?- preguntó confundido

-Esto... Esto no está bien- me giré y comencé a dar vueltas con mi mano masajeando mi cien -Yo no debo, no puedo hacer ésto... - hice una breve pausa y exhale fuerte -Disculpame por lo que hice antes, yo...-

-Max...- su voz se escuchaba desilucionada

-Perdón por lo que dije antes, no era mi intención, lo siento, eres mi hermano y yo no debí hacer...-

-¡No soy tu hermano Max!...- interrumpió molesto -No lo somos, ¿Acaso no ves lo que está pasando ahora?-

-¿Lo que está pasando?- pregunté confundido -Tul... Yo no... No puedo hacer esto ahora-

-¡¿Por qué?!- preguntó serio -¿Es por Yu?- un par de lágrimas mojaron su rostro

-Ve a mi alrededor Tul...- dije, señalando a mi alrededor con las palmas de mis manos extendidas -No existe rincón en éste lugar que no me recuerde a Yu, ni en mi vida... Simplemente no puedo hacerlo, yo...-

La expresión en el rostro de Tul cambio a una molesta. Tomo mi mano y me arrastro hacia la habitación de invitados, su actual habitación. Ambos entramos y cerró fuertemente la puerta tras él

-¿Qué te parece aquí?- preguntó Tul

Ambos nos vimos fijamente en silencio, la tensión entre ambos se sentía fuertemente en ésta pequeña habitación. Su dulce mirada me era irresistible. Hacía tanto tiempo que no sentía esto y de nuevo lo volví a sentir... Por la misma persona.

Debí pensarlo más, debí sujetarme al piso, debí quedarme plantado en mi lugar y no moverme nunca. Pero en vez de eso, caminé lo suficiente hasta acunar su rostro entre mis manos y besarlo tan frenéticamente hasta golpear su espalda contra la puerta tras de él, como si no hubiese pasado nada en estos últimos 6 años, como si mi sueño universitario se estuviera haciendo realidad en éste momento. Bajé una de mis manos para sostener fuertemente su cintura y presionarla hacia mí. Paso a paso nos acercamos a la cama y suavemente se dejó caer de espaldas en ella. Lo que tanto había anhelado desde niño, desde secundaria, ahora se hacía realidad. Tantas veces había soñado e imaginado éste momento en el pasado. Tomé mi lugar sobre él en la cama y mi anhelado Tul cedía maravillosamente a mis caricias y a mis besos, simplemente se dejó llevar por completo.

Hasta Que Te EnamoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora