シ ¿ᴇʀʀᴏʀ? シ [KuboKai One-shot]

シ Capítulo único シ

El timbre de la última hora sonó, y Saiki, Nendo, Shun y yo nos fuimos juntos hacia la salida de la escuela.

El silencio inundaba nuestro alrededor, interrumpido por el sonido del aire contra las hojas de los cerezos, y desgraciadamente, Nendo tuvo que interrumpir la calma.

—Hey, estaba pensando en organizar una fiesta, y obviamente vosotros seréis los primeros en estar invitados—. Dijo, bastante emocionado.

Como era de esperar, Saiki le miró fijamente, con un rotundo "no" en su mirada. En cambio Shun aceptó emocionado, al igual que yo, ya que me gustaba pasar el tiempo con mis amigos, ¿y que mejor forma de pasarlo que en una fiesta, donde te puedes liar a puñetazos con cualquiera?

Nendo se alegró mucho de que hubiéramos aceptado todos. Bueno, la opinión de Saiki no era válida, según Nendo.

Llegamos a la salida y cada uno se fue por su dirección; Shun y yo nos íbamos juntos cómo siempre.

—Estoy emocionado por la fiesta, ¡seguro que irá mucha gente interesada por mi historia! ¡O a lo mejor hay algún infiltrado de la alianza oscura!—. Exclamaba Shun, con un fugaz brillo en sus ojos.
No pudo evitar sonreír al ver su entusiasmo.

—Solo espero que mi madre me deje ir. ¡Es muy estricta y eso me pone de los nervios!—. Dijo el peli-azul, apretando fuertemente su puño derecho.

—Bueno, eso no se lo dices a la cara—. Dije, despeinando su ya despeinado pelo.
La cara de Shun adoptó una mueca molesta, pero luego se rió por el supuesto chiste que hice; ni siquiera era un chiste, era la realidad.

Durante el camino tuvimos conversaciones variadas: sobre mi anterior vida de delincuente, de la alianza oscura, sobre el tipo de comida y bebida que llevaríamos a la fiesta, e incluso hablamos de la belleza de Teruhasi.

Shun llegó a la entrada de su casa, deseando que su madre le dejara ir a la fiesta. Y yo ya me fui hacia mi casa, alegre, sabiendo que iría a la fiesta sin necesidad de pedir permiso.

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Finalmente llegó el día de la fiesta, y Nendo, Saiki, Shun y yo nos fuimos juntos hacia el pequeño local abandonado donde acordamos hacer la fiesta.

Poco a poco nuestros compañeros de clase fueron llegando, también alumnos de cursos más altos y más bajos.

El local terminó lleno de adolescentes, tanto hombres como mujeres. También había un gran grupo de matones con cara de idiotas; no peleé con ellos, pero si lo hubiera hecho se hubieran ido llorando a sus casas, suplicándoles a sus madres que les cure las heridas. ¡Ja! Parecían pollos mareados buscando a Teruhasi por allí para hacer con ella a saber el que, esos malditos maleducados...

En realidad ella estaba con Saiki, aunque él ni siquiera le prestaba atención, Saiki tan solo estaba en su mundo, como de costumbre.
Nendo estaba con Hairo, compitiendo por quien se bebía la limonada antes. Una real tontería, en mi opinión.

Shun sostenía un vaso de cartón con cola. El peli-azul estaba hablando con un pequeño grupo de chicos y chicas, seguramente sobre la alianza oscura. Se le veía feliz, sonriendo todo el tiempo, estaba tan... guapo, digamos. Por primera vez en mi vida dejé de mirar a los matones, o a las chicas bonitas en grupo, para tan solo verlo a él sonreír y disfrutar.

Creo que se dio cuenta de mi mirada, porque dejó la conversación para mirarme. Yo tan solo agité mi mano en modo de saludo y Shun se acercó a mi, pasa sentarse a mi lado.