DragonKin

26.- Volver a clases

Hermione y Neville esperaron pacientemente fuera del Gran Comedor donde comenzaba el desayuno. Ron estaba con ellos, medio volteado hacia el Salón mientras el aroma de los panqueques flotaba fuera de la habitación.

Ron se movió inquieto de un pie a otro, obligándose a esperar. "Espero que se den prisa. Seamus se comerá todos los panqueques antes de que lleguemos" murmuró.

Neville rió mientras Hermione reprendía "Estarán aquí, Ron. Probablemente Draco quiera hacer una entrada".

El pelirrojo puso los ojos en blanco. "Una entrada, dice ella. Quiere asegurarse de que todos entiendan que Harry está fuera de los límites, es más parecido".

Los dos Gryffindors no se dieron cuenta del acercamiento de Harry y Draco mientras discutían. Los compañeros de vínculo se encontraron con los ojos de Neville, quien solo sonrió y negó con la cabeza a los otros dos.

El divertido acento de Draco interrumpió la pelea. "Tendré que detener los rumores sobre ti, Ronald. Obviamente tienes más inteligencia de la que se reconoce públicamente. Mi compañero de vínculo definitivamente está 'fuera de los límites'".

La boca de Ron dejó de formar las palabras de saludo cuando las palabras de Draco se asimilaron. "¿Y quién inició los rumores?" La rubia sonrió en respuesta. "Bien. Bueno, ahora que estás aquí, ¿podemos entrar antes de que Seamus se coma mi porción y la suya?"

Harry se rió entre dientes cuando el estómago de su amigo retumbó con fuerza. "Creo que es mejor, Ron. Recibiste mi nota esta mañana, ¿verdad?"

"No hay problema, amigo. Te sientas con los Slytherin hoy y con nosotros mañana."

El quinteto entró en el Gran Comedor y se detuvo. Harry y Draco asintieron cortésmente a los Gryffindors, quienes se dirigieron a su mesa. Harry mantuvo su rostro impasible mientras miraba hacia el Gran Comedor mientras él y Draco posaban por un momento. El rubio había insistido en vestirlos con atuendos complementarios, aprovechando que los uniformes eran opcionales para sexto y séptimo año. Sus esfuerzos obviamente valieron la pena si el silencio que encontró a su entrada fue una indicación. Notó que algunos tenedores habían detenido sus viajes hacia bocas de espera, mientras que algunos estudiantes que habían comenzado a beber no notaron que el jugo goteaba por sus barbillas. Harry podía decir que Draco se deleitaba con la atención y el reconocimiento de que ambos eran magos atractivos, ricos y poderosos. Después de la pose adecuada,

"Brillantes bendiciones" dijo Harry, asintiendo a su vez hacia Blaise, Pansy, Vincent y Greg.

Su saludo informal fue respondido con buen humor. Los ojos de Blaise brillaron hacia Draco. "Buena entrada", elogió.

"Muy impresionante" asintió Pansy. "Un buen efecto; están muy juntos, ricos y poderosos".

Harry se rió entre dientes y untó mermelada en su tostada. "Esa es la impresión que queríamos" le preguntó a Draco.

La rubia sonrió. "Debo estar resbalando; quería ser peligroso allí también, pero Harry no me dejaba usar una daga."

Harry negó mentalmente con la cabeza, divertido por las maniobras. Draco había planeado todo para enviar mensajes sutiles. Harry estaba en su atuendo del Clan con una nueva túnica escolar hecha a medida. Llevaba el pelo recogido y atado con un broche de plata de la bóveda familiar. Draco vestía pantalones negros similares, pero una camisa de seda plateada. Su cabello rubio también estaba recogido y atado, un estilo que los Jefes de Casa usaban tradicionalmente. Cada uno de ellos también mostró sus anillos de sello.

Incluso conocer a Ron, Hermione y Neville había sido parte de la impresión que Draco quería dejar. Los tres entraron con ellos, demostrando su amistad y alianza continua y dieron el sutil mensaje de que estaban protegidos por los dos poderosos Jefes de Casa. Sin embargo, la pareja unida también se sentó con los Slytherin, por lo que cualquier información que recibiera Voldemort revelaría la creciente cercanía de Harry con aquellos que probablemente apoyaran al Señor Oscuro.