Prólogo

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Era primavera del 2006, en la escuela secundaria Benito Juárez #69, y la temperatura ascendía con vigor en la ciudad de Tepito. Estaban recostados en el  jardín del patio central, el césped les hacía cosquillas en la nuca, Jimin y Hoseok discutían casi a gritos, mientras que Namjoon y Jin; leían un libro juntos -El retrato de Dorian Gray-. Taehyung y Jungkook jugaban con una pelota, alguno de los dos cayó eventualmente, rodando por el suelo. 

—¡Te digo que no, Hoseok! La horchata es lo mismo que la leche. Nadie comería en su sano juicio, con leche. Iugh—argumentó Jimin, cruzándose de brazos.

—Lo dices por su delicioso y dulce sabor. ¿Verdad? Todos aman lo dulce, tu paladar debe estar estropeado—Hoseok sonreía triunfante.

—¡Lo único estropeado es tu juicio!—gruñó Jimin.

Jin arqueó ambas cejas, mirando tentativamente las páginas del libro y las expresiones de sus amigos. NamJoon reía, sacó unos audífonos de su bolsillo y se los ofreció a modo de disculpa. Todos los días, por cualquier tema y a la misma hora, Jimin y Hoseok discutían interminablemente. Sus amigos estaban cansados de ello, al principio era entretenido, después de conocerse desde preescolar, dejó de serlo.

—¡Estás haciendo lo mismo que en primaria!—dijo Hoseok.

—¿Con quién hablas, we?—Jimin bebia despreocupadamente de su termo lleno de Jamaica.

—No te hagas el tonto, Park.

Jimin lucia desconcertado, tras unos segundos de entrecerrar los ojos y volver al pasado, abrió la boca y comenzó a reír a carcajadas.

—No me digas. ¿Vamos a hablar de Min Yoon Ji? Pero a ti nunca te gustó. —Jimim negaba repetidamente.

Al otro se le pusieron las mejillas rojas, tal vez por calor, o por vergüenza. Tomó un gran sorbo de su termo con agua de Horchata.

—No lo dije. Pero ella... Realmente me agradaba, Jimin. Quería invitarla por un agua de la Michoacana, ¡La cita perfecta! Pero tú saliste con ella antes. ¡Y no me lo dijiste!

—Vamos, ¿Cómo podría adivinarlo?—se mofó su amigo.

—Exacto. No lo sabías. Pero ahora defenderé mis ideales como todo un hombre. Tal vez termines fascinado con ellos luego. Tienes tendencia a ello.

—Oye, ¡Tú, hijo de...!

—Suficiente—NamJoon se acercó hacia ellos.

Ambos tenían un enfrentamiento de miradas serías y decididas, mientras su compañero racional se interponía entre cada uno.

—Tal vez ningún agua es mejor que otra, ¿Saben? Pero si tanto insisten, deberían cuestionar a otros y ver lo que...

—O vender, quien tenga más ventas; gana—Jin se quitó un audífono para aportar a la conversación.

—Espera, eso no...—comenzó Nam, pero lo interrumpieron al unísono.

Jimin y Hoseok estrecharon sus manos violentamente, cerrando el trato. Trato que tendría frutos dentro de seis años.

Agua de Horchata • Hopemin • TaeGi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora