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Soltó un suspiro al mirarse al espejo, ¿que le había pasado?, ¿en que momento se descuidó tanto? y más importante, ¿por qué lo hizo?

Ya no era el hecho de ser una rata el que lo atormentaba, con el tiempo se acostumbró y hasta ahora se puede decir que le gusta, incluso un poco más de cuando era humano, pues de hecho tiene muchas ventajas

Pero maldice el momento en el que dejó de ejercitar y se postró en un sofá

Incluso después de mutar, seguía teniendo un cuerpo envidiable, si bien no hacía ejercicio como tal, se mantenía en condición por estar huyendo de los yokais de la ciudad oculta, y cuando logró salir, de la gente de Nueva York

Y ahora ni si quiera se reconocía en el espejo

Asi que ahí estaba, analizando su desgastada figura frente a dicho objeto, mirándose una y otra vez de arriba hacia abajo, mientras su cabeza se encargaba de resaltar cada desperfecto que este tenia, cada error que el
Pasar del tiempo le había otorgado

Sus atractivas facciones habían sido remplazadas por ahora solo pelo, bigotes y barba

Y su Antes marcado y perfecto abdomen se había vuelto una barriga grande, su espalda llegaba a doler algunas veces por el mismo sobre peso con el que ahora tenía que lidiar sumándole su edad; y su altura había disminuido enormemente, dejándolo como un pequeño, viejo y regordete hombre rata con una condición física deplorable

Suspiró de nuevo abrazándose así mismo y desviando la mirada de su reflejo, recordando los días en el que su cuerpo era el de un Dios griego y su fuerza física era incomparable

Y entonces las lágrimas comenzaron a nublar su mirada, por lo que rápidamente las limpio, pero eso no evitaba la sensación ácida que estaba punzante en su pecho, y que aquellas gotas de agua seguían presentes, cada vez haciéndose más, hasta llegar a resbalar por sus mejillas

— Lou -

Cuando escuchó la voz de Draxum rápidamente volvió a limpiar sus lágrimas, dando un pequeño salto e intentando actuar como si nada

— Draxum - contestó forzando la sonrisa más natural que su estado de animo le permitía — ¿necesitas algo?-

— Los niños están haciendo la cena y quieren que vayas a probar -

Su Yokai ya lo estaba mirando de una manera extraña, por lo que se dio la vuelta intentando hacer como que estaba ordenando algo solo para que dejara de hacerlo

— En un momento voy, estoy algo ocupado- respondió rápidamente, siguiendo con su acto

— ...Ajá -escuchó los pasos de Draxum, por lo que suponía ya se iba de la habitación, pero en cuanto sintió las manos grandes de este en sus hombros y como estas le dieron vuelta, se congeló — ¿Qué te pasa?- le preguntó con un rostro consternado

— ¿Qué?, ¿de que hablas?- a pesar de aquella mirada, seguía intentando, tal vez si lograba mantener aquella actuación por un poco más, lo dejaría en paz

Su pregunta no fue respondida, y aquellos ojos anaranjados le seguían mirando preocupado e incluso un poco triste, sintiendo las manos contrarias viajar desde sus hombros hasta su rostro y acariciar sus mejillas

— ¿Por qué estuviste llorando?-

— No lo estaba-

— Lou -

Puso sus manos sobre las que estaban en sus mejillas y poco a poco sus ojos se inundaron de nuevo, y sin más, se quebró

Las lágrimas volvieron a bajar como cascadas desde sus ojos y sus sollozos se hicieron oír, por lo que inmediatamente el morado le envolvió en un abrazo, el cual correspondió escondiendo su rostro en el hombro ajeno, dejando ahí su llanto

— ¿Que pasó?- escuchó la voz suave del yokai despues de un pequeño tiempo, sin separarse del abrazo

— ¿Recuerdas cuando aún era Lou Jitsu y no... esto?- preguntó con un hilo de voz, conteniendo sus sollozos

Draxum asintió

— Extraño verme así- confesó — extraño sentirme bien con mi cuerpo y no tener dolores de espalda siempre, mi condición física, mi fuerza, extraño todo- se quedó en silencio por unos Segundos intentando no volver a explotar en llanto — ahora solo soy un pequeño hombre rata que ni si quiera llega a la mitad de lo que solía ser-

Draxum inmediatamente se separó, volviendo a tomar su rostro y plantándole un pequeño pero cariñoso beso en los labios

— Quizás ya no te veas como antes- se detuvo a limpiar sus lágrimas — Pero sigue siendo el gran Lou Jitsu para mi y para los niños - le dedicó una sonrisa tan tierna que quiso corresponder, pero simplemente no pudo

— Pero- —

— No - le interrumpió — tu físico es lo que menos importa, mira todo lo que has logrado, criaste cuatro niños hermosos, les diste un hogar, los entrenaste de alguna u otra manera- aquello logró sacarle una risa — incluso volviste a pelear en el battle nexus y ganaste; ¡salvaste al mundo!- le miró fijamente a los ojos sin quitar esa sonrisa de su rostro — Eso es lo que te hace Lou Jitsu -

Unas cuantas lágrimas más desbordaron de sus ojos, pero ahora tenía una sonrisa, mientras miraba a los ojos de su pareja quien lo veía con ternura

— Gracias - agradeció con un tono de voz suave, recargando su rostro en la mano que lo acunaba

— Además, me gustas más así - se rió de nuevo, negando con la cabeza — ¡Es en serio!, sí, podrías haber sido muy guapo en ese entonces, pero ahora te ves muchísimo más lindo y muy tierno -

Se miraron a los ojos unos Segundos, para después unirse en otro beso corto, pero lleno de amor y cariño

— Ven, seguramente ya terminaron de hacer la cena y tú no la probaste - se levantó de donde estaban abriendo la puerta y dejándolo pasar primero

— Me gustan las sorpresas, además naranja es buen cocinero y siempre prepara delicias -

— Lou - lo llamó

— ¿hm?-

— Te amo-

— ¡Eeeww!- escucharon a Leonardo de fondo — ¡no en frente de Mikey, por favor!-

Y entre risas, fueron a cenar

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🥺💕

Baronjitsu shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora