💌2!

606 111 13
                                    

Yoongi.

Habían pasado unas semanas desde mi charla con Hoseok acerca de Jeon Jungkook. No había dudado en comentarle acerca de los "costos" que involucraban tener un favor de ése hombre (según mis compañeros de clase), pero Hoseok llegó a la misma conclusión a la que yo llegué: podría tratarse de algo material, algo monetario o alguna otra cosa, porque después de todo Jungkook era un niño, y bueno, ¿qué podría pedir un estudiante de segundo año? ¿las respuestas de un exámen?, sería sencillo.

Volviendo a la realidad, estábamos esperando a Jungkook en la azotea.
Hoseok había hablado con él hace unos días, y sí, le había contado el plan.

Enredé mis manos entre sí gracias a la brisa de aire frío, mientras veía de reojo a Hoseok. Tenía una enorme sonrisa en el rostro, y creía saber el porqué.

— Suéltalo.

Murmuré, mirando esta vez el cielo levemente gris. Hacía demasiado frío, y si Jungkook no se aparecía en unos minutos definitivamente mandaría todo a la mierda.

— Él está por venir— dijo Hoseok, despegando su teléfono de su rostro—, ¿y sabes? ¡está entusiasmado por ayudar a sus hyungs! No parece ser un chico malo, ¿no crees?

Las palabras de Hoseok me dejaron un tanto impresionado, porque primeramente, ¿quién aceptaba ser cómplice de un plan tan malo como éste, además de Hoseok y yo? Empecé a masajear mi barbilla con mi pulgar. Ésto estaba siendo demasiado sencillo, ¿y eso no era eso...bastante extraño?

Salí de mis pensamientos cuando la mano de Hoseok tomó mi antebrazo y le dió un pequeño apretón.

— Vamos, es demasiado tarde como para arrepentirse.

Bueno, Hoseok tenía razón en ello, pero...las piezas al menos para mí, no encajaban en nada. Tal vez estaba siendo paranoico respecto a lo que había escuchado de él, y ya.
Decidí relajarme, mientras me recargaba en una de las paredes de la azotea y miraba las nubes.

Mis párpados se abrieron cuando Hoseok chilló, como si se tratara de un pájaro o algo parecido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mis párpados se abrieron cuando Hoseok chilló, como si se tratara de un pájaro o algo parecido. Aparté mi vista de la extraña nube en forma de estrella, para poder mirar al frente.
Bueno, efectivamente lo había visto antes, y ése antes, fué el mismo día en el que ví por primera vez a Jimin.

Hoseok se apresuró en abrazar a Jungkook, y después retroceder para que pudiera presentarme.

Mi teoría acerca de que se trataba de un niño simplemente se reforzó al toparme con sus ojos redondos e inocentes, cubiertos levemente por su flequillo castaño. Oculté una risa nerviosa, y me apresuré en hacer una pequeña reverencia.

—¿Min Yoongi...hyung?

Preguntó. Su voz hizo que un pequeño escalofrío recorriera mi espalda.

— El mismo. Me imagino que Hoseok te contó de mí, y me imagino que también exageró algunas cosas.
Jungkook, ¿no es así?

Pregunté con suavidad, escondiendo mis manos en las bolsas de mi suéter azúl. Jungkook asintió, con una pequeña sonrisa en el rostro.

—Escuché mucho de usted, hyung. Estoy ansioso de conocerlo.

Hoseok dió pequeños aplausos, como si alguno de los dos hubiese dicho un hermoso discurso.
Relamí mis labios, mientras me balanceaba en mis pies. Ésto no terminaría bien, o bueno, al menos no como Hoseok se imaginaba. Tenía...ése presentimiento.








¡Un novio para Yoongi! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora