Mute ✧; Chaelisa

마흔 하나; Cuarenta y uno

Por la mañana, cuando desayunaban, y la señora Park se había ido a hacer unas compras, Lisa aprovechó para hablar con Chaeyoung.

-¿Qué pasó en tu pesadilla?- preguntó, masticando sus cereales con yogurt de frutilla.

Chaeyoung pensó un minuto, antes de escribir en su cuaderno.

"¿Anoche?"

-Ajam.

De nuevo, la muda recordó por un momento.

"No recuerdo bien. Pero al principio del sueño, yo podría hablar".

Lisa asintió, esperando a que Chaeyoung siguiera escribiendo.

"Creo que iba contigo a decírtelo, pero cuando te enterabas me dejabas".

Lisa frunció el ceño, algo ofendida.

¿En serio Chaeyoung pensaba que ella es capaz de dejarla?

"Te ibas cuando te enteraste que podía hablar. Me dejabas sola. Recuerdo que lloraba y que pedía a gritos que volvieras, pero me ignorabas".

Lisa pasó sus cereales con algo de dificultad, de repente se sentía culpable.

"Pero luego escuché tu voz, que me llamabas, y desperté, seguías ahí".

Lisa sonrió un poco, Chaeyoung también.

La rubia tomó su mentón, dejando un corto beso en los labios de la muda.

-Nunca me iré- dijo.

Chaeyoung asintió.

"Lo sé"

-Nunca te dejaría, no lo haré.

Chaeyoung se ruborizó.

-Me asusté un poco cuando te vi, sabía que no estabas soñando nada bonito.

Chaeyoung sólo se encogió de hombros.
La muda sabía que sólo había sido una pesadilla, que eran normales, no era la primera y no sería la última, pero no tenía miedo, sólo era su imaginación, y no ocurriría.

[...]

10 de diciembre.