Capitulo 1

16 3 0
                                    


Todo mi alrededor es extraño, ahora todo se me hace nuevo hay unas 6 personas revueltas en la pequeña sala las paredes son de un tinte Amarillo, no tan fuerte sino apagado, el techo de color blanco hay una secretaria no la reconozco por lo que supongo que debe de ser nueva en este sector o "talvez yo me olvidé" me acerco a ella.

Me mira como tratando de reconocerme, pero no lo logra está sentada así que no puedo ver mucho, pero por lo que veo trae una especie de terno negro con cortas y debajo de una camiseta manga larga blanca, tiene el pelo negro me da una pequeña Sin mostrar los dientes, es sonrisa forzada pero como no, se está dirigiendo a un desconocido y es su trabajo.

-Disculpe, puedo ayudarlo-me dice ella y es cuando me doy cuenta que la estaba mirando fijamente, observándome detalladamente.

-Eh, si me podría contactar con el señor Namikaze-le digo, mientras ella asiente y coge un teléfono.

Hablo en voz alta pero honestamente yo no la escuchaba estaba pensando en todo lo que está pasando el volver, el volver a hablar con él, "la posibilidad de encontrarme con ella" todo me estaba poniendo muy nervioso. A veces solo quisiera desaparecer y estar en un lugar tranquilo, pero estoy en la realidad y tengo que ponerme en ello ya no soy un niño débil al que cualquiera podía manipular a su antojo, ahora soy un adulto y voy a actuar como tal.

-Señor, el señor Namikaze lo espera en su oficina, suba a el ascensor arriba ahí tres puertas la de en medio- Me dijo la chica.

-Ok, muchas gracias-le digo a lo que ella asiente y le doy una sonrisa de lado y me voy.

Presiono el botón y mientras espero a que se abran las puertas miro hacia abajo viendo mi reflejo en el piso de cerámica no me alcanzo a apreciar bien.

Las puertas del ascensor se abren y en cuanto entro observo como se cierra poco a poco como esperando a que alguien entre, pero no pasa las puertas se cierran y yo me quedo adentro, por el movimiento que tiene supongo que está subiendo solo queda esperar.

Las puertas se abren y lo primero que veo son dos puertas una en cada lado de la tercera y por lo grande supongo es la de él.

Mientras camino me tiemblan las piernas, es la primera vez que lo veo después de tanto él ya debe saber que soy yo, aunque nunca le dije mi nombre a la chica estoy seguro que él lo sabe.

Toco las puertas recibiendo un pase del otro lado no sonaba molesto igual no tenía que estarlo, pero más bien por su voz parecía estar feliz.

Abro las puertas

-OBITO-

recuerdoWhere stories live. Discover now