Versión en español.
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La lluvia cayó en esa noche solitaria, las calles estaban vacías y los aldeanos se escondieron en sus casas. Las tormentas en ese pequeño pueblo eran terribles y totalmente siniestras. Cuando cayó la noche en enero, todos se refugiaron por temor a volver a escuchar los gritos en la casa abandonada. Cada año, un nuevo inquilino alquilaba esa casa de verano y regresaba a su verdadero hogar, traumatizado y paranoico.
En una noche de verano, Aldara conducía tranquilamente por las calles, buscando la casa que había alquilado para descansar y pasar unas tranquilas vacaciones lejos de la zona de trabajo y lejos de su ciudad donde constantemente la buscaban por ser la más calificada de la oficina.
La mujer estacionó frente a su casa, su techo a dos aguas con sus majestuosas ventanas la hacían lucir verdaderamente majestuosa, las enredaderas que envolvían bellamente las paredes y la hacían más natural y acogedora. Se instaló con sus maletas en su habitación y miró a su alrededor, de pronto la ventana se abrió cuando menos lo esperaba y una fuerte ráfaga de viento la congeló. A pesar de haber cerrado la ventana, la habitación todavía estaba fría y parecía estar bajo cero grados. Luego de ese suceso, Aldara fue testigo de hechos completamente extraños para ella, por la noche las escaleras chirriaban como si alguien subiera o bajara hasta donde estaba la mujer.
En una de esas noches, mientras Aldara cenaba en la gran mesa, un hombre guapo se sentó frente a ella como si estuviera viendo su alma, no dijo una palabra, la pelirroja sintió un escalofrío recorrer todo su cuerpo. Después de ese evento, el apuesto hombre no dejó de seguirla a donde quiera que fuera, cuidándola a su manera en las sombras aunque ella fácilmente podía notarlo. Cuando ambos estaban en la misma habitación, ésta se congelaba.
La pelirroja, aunque en cierto modo se sentía aterrorizada por el espectro, por dentro sentía afecto y atracción como si de un imán se tratara.
Aldara vio las estrellas adornar el oscuro cielo nocturno desde la sala de estar. El gran ventanal que tenía esa habitación era perfecto para disfrutar de las vistas al campo. El sofá junto a ella se hundió y sintió una mano acariciar suavemente su cabello, el hombre peinando su largo cabello en una trenza desordenada. Su cuerpo cálido gracias a la chimenea en llamas contrarrestó el cuerpo helado de Taehyung.
El hombre de cabello azabache se inclinó hacia ella y susurró.
—Las estrellas esta noche se parecen a ti, brillantes y hermosas.
El joven espectro dejó un beso en su cuello y el toque en su cuerpo desapareció. Cuando Aldara se volvió para verlo, él estaba sentado contra el reposabrazos y el respaldo del cómodo sofá, mirándola con la barbilla en alto, sus ojos dejando ver un brillo como la luna. Su camisa estaba abierta y su musculoso torso estaba expuesto. Los pantalones de mezclilla apretaban sus muslos, una vista encantadora para la joven.
Las mejillas de Aldara se pusieron rojas y miró por la ventana, sintió a Taehyung sonreír y su cuerpo desapareció. Decidió no molestarla más esa noche y observar desde las sombras cómo Aldara se auto-complacía en su cama blanca.
Sabía perfectamente que para ella era lindo y, al mismo tiempo, atractivo. Quería esperar a que llegara el día tan esperado para poder interactuar correctamente con ella, sin devorarla con los ojos y verla de manera amorosa.
Cuando el calendario de su celular informó que era el 7 de enero, el cuerpo de Aldara comenzó a sentirse extraño, como si estuviera dividido. La luna brilló como nunca e iluminó la habitación de la pelirroja, cuando se vio en el espejo de la pared, sus ojos tenían un brillo dorado y detrás de ella, el misterioso hombre la miraba sentado en la cama.
La mujer se quedó sin habla, una parte de ella quería ir con él pero la otra parte le tenía miedo, parecía dividida por la mitad por su fuerte dualidad. Nunca había visto a este hombre antes, pero sentía que lo conocía de alguna manera.
El hombre pronunció palabras que la dejaron congelada y confundida, dijo:—Te estaba esperando, mi amor. Cada noche, cada enero, ahuyentar a aquellos hombres y mujeres que no tenían tu apariencia valió la pena. Te esperé mil quinientos cuarenta y tres años, cariño.
Aldara abrió mucho los ojos, su dualidad ganó por un momento y se acercó a tomar su mano cariñosamente, parecía que una persona había tomado y controlado su cuerpo.
—Te extrañé, Tae. Mi alma pudo encontrar un cuerpo igual al de mi vida anterior. Antes no podíamos volver al otro lado, pero hoy la puerta finalmente se abrió para nosotros.—respondió.
—Nuestro amor es más poderoso y fuerte que ninguno— Aldara sintió que una parte de sí se desprendía de su cuerpo y fue testigo de cómo una persona idéntica a ella se acercó para abrazar a Kim Taehyung y ambos desaparecieron ante sus ojos.
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FIN
Lo dejé con final abierto, bitches. Besos en el siempre sucio, muak muak.
Pd: Si recibe mucho cariño tal vez haga un fanfic más detallado a profundidad.
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GHOST ︙ KTH
Fanfiction˗ˏˋ 𝕲𝖍𝖔𝖘𝖙 ˎˊ˗︙ ONE SHOT Este pequeño relato lo escribí para un trabajo práctico, pero me gustó tanto que lo adapté con un miembro de BTS, Kim Taehyung. Espero que lo disfruten, comenten lo que opinan y voten si les fue de su agrado la lectura...