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El sol se coló por su ventana haciéndolo refunfuñar, dándose la vuelta para poder volver a dormir. Estaba por cerrar sus ojos nuevamente cuando escuchó un pequeño golpe en su ventana. Cerró los ojos ignorando el ruido anterior, pero los volvió a abrir cuando lo escuchó una vez más, luego otra y otra, y así varias veces más.

Irritado se paró de su cama yendo hacia su ventana.

-¿Qué cojones ha- se detuvo al ver a quién estaba fuera de su casa con pequeñas rocas en las manos- ah, eres tú, ¿ qué pasa guarro? 

-¿Cómo que qué pasa? ve la hora que es, vamos a llegar tarde y el primer día

-Jodeeeeer, se me había olvidado, pensé que era la siguiente semana. Aguanta bebé- dijo lo último riendo y contagiando de risa a su amigo

Se estiró un poco y se dirigió hacia su armario, buscando que ponerse. Decidió ponerse una playera rosa y encima una sudadera amarilla más unos jeans negros y tomó sus únicos tenis aparte de los de deporte y se los puso, unos vans de color verde con azul. También tomó su maleta y ahí gurdo su ropa para el entrenamiento de ese día, más sus otros tenis.

No se preocupó por bañarse, ya que lo había hecho la noche anterior, y además de podía bañar en los vestidores de la escuela.

Tomó su maleta y su mochila y salió apresuradamente de su casa, no sin antes cerrar la puerta con llave.

-Tardaste mucho perla- dijo con un tono de queja el de ojiverde

-¿Me perdonas?-dijo fingiendo arrepentimiento el de fleco teñido

-Solo porque eres tú, si no, no- le dijo perxitaa a su amigo

-Bueno, vámonos que se nos hace tarde perraco

Ambos rieron por el comentario de Auron y empezaron a caminar hacia su escuela.

Tenían suerte de ser vecinos y de vivir a solo unos pocos metros de su escuela, ya que siempre estaban juntos, eran como hermanos. Tenían una amistad bastante larga y muy fuerte, desde pequeños eran muy unidos.

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Karma era la escuela de estos dos amigos, sí, ellos iban en Karma, una de las escuelas más conocidas y prestigiosas en Karmaland, ya que además de ser una gran escuela por sus instalaciones, era conocida por los alumnos prestigiosos que habían ahí, uno de los más conocidos... Auron, sí, ese mismo. Era conocido por varias personas por ser el capitán del equipo de futbol, pero no era el único famosillo por ahí. En fin, habían más personas talentosas como él en esa escuela.
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Llegaron apenas el timbre sonó, sin duda que tenían suerte. Ya que era su primer día no podían llegar tarde, si no su profesor Karchez se encargaría de su detención.

Caminaban alegremente por los pasillos, recibiendo uno que otro saludo por parte de sus compañeros, ha que ellos eran algo así como "populares".

Llegaron a su salón un poco tarde, por lo que la puerta ya estaba cerrada. Tuvieron que tocar un par de veces para que la maestra les abriera.

-Llegan tarde- fijo algo cansada esa maestra, parecía que esa situación no era la única vez que pasaba.

-Perdone profesora Julia, es que aquí mi amigo- paro para voltear a ver a Auron- no se había despertado y lo tuve que esperar

-Solo vayan y tomen asiento- volvió a decir con ese tono la profesora.

-Ya la tenemos hasta la polla ¿No crees perchas?- le dijo en un susurro a su amigo

-Ya ves tío- perxita se rió por lo bajo.

Caminaron a sus lugares de siempre.
Auron estaba por sentarse cuando escuchó un grito.

-¿Que coño crees que haces anormal?

Volteó a ver a la persona que le había dicho eso, pero no recordaba haberla visto.

-¿Que cojones? Se supone que estos son nuestros lugares- dijo volteando a ver a su amigo, el cual tenía la misma cara de confucion que el.

-Pues ya no- dijo el pelinegro volteando a ver al chico frente a el- ahora son nuestros.

-Vaya putada- se escuchó por parte de Auron- anda, vámonos perchas, no te juntes con la chusma.

Caminó hacia los otros únicos asientos libres, pero paro en seco cunado no vio a su amigo detrás de él.
Volteó hacia donde antes para verlo plantado en frente de un chico, que también parecía nuevo.

Se acercó lentamente hacia su amigo y se chupó un dedo, para luego introducirlo en la oreja de este último, el cual reaccionó pegando un suave chillido.

-Que puto asco tío

-Estabas perdidísimo eh, dame gracias de que te devolví a la tierra puerco- dijo riendo levemente- anda, vamos, que nos robaron nuestros lugares.








Se que es algo corto, pero pronto escribiré la siguiente parte, esta vez si lo prometo ;)

Otro amor adolescente? // RebornplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora