Cuando te conocí y el mundo cambió.

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Podría declarar que nunca he conocido el amor pero allí, en ese preciso momento, en cuanto las palabras saldrían de mi boca, estaría nuevamente mintiendo. A veces me pregunto por qué una mentira suele aparentar ser mejor que la verdad o, por qué la verdad acostumbra a doler demasiado. 

Soy una chica que miente; la verdad asusta.

Conocí a un chico, lo ame tanto, demasiado, muchísimo, todos los sinónimos que reflejan cuán grande fue. Pero ese mismo chico, aquel chico al que una vez ame, me rompió el corazón.

Ahora imagina un corazón rojo, tan fuerte, completo de amor y lleno de alegría. ¿Lo has imaginado? Ese corazón, palpitante de sinceridad, amistad, del más tierno afecto romántico, termina herido por otra persona, por un tercero en discordia. Ese corazón tan hermoso y sereno, se volvió oscuro y se perdió en su propia tinieblas.

Aquel corazón era el mío.

Y todo fue un desastre.

Pero lo supe, lo supe desde la primera vez que nuestros ojos conectaron.

Cuando lo conocí y el mundo cambió.

Cuando te conocí y el mundo cambióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora