He tenido pesadillas ultimamente, no he podido dormir gracias a ellas, son espantosas, donde todo el bosque se quema, y todos los animales son expulsados por las llamas y otros cuerpos de ellos en el piso.
No quiero ver mas ese tipo de escenas, tan solo recordarlas me hacen llorar al instante y no se la razón, simplemente...amo este gran bosque.
No sé si mi padre me deje volver a mis clases de pintura otra vez, al pareser desde aquella vez que volví tarde y lo que pasó en el otro pueblo lo asustó demasiado.
Ahora estoy haciendo fideos de arroz, debo decir que el clima de hoy me encanta, aunque aveces tambien me inquieta un poco, todo el cielo está nublado, la temporada de invierno se acerca.
Para ser sincero, siento que este dia será increible.
- shun, ya has terminado?
- Los fideos se estan cecando padre- se acercó a el quien estaba sentado en una de las sillas de la mesa
- gracias por ayudarme- tomó el rostro de su hijo en sus manos
Shun sonrio dulcemente- Padre mi hermano tuvo que vijar de nuevo? Tuvo que ir lejos?
- No, solo fue pasando las montañas
- Pero, eso es muy lejos..
- lo se, pero no le pasará nada a tu hermano, asi que tranquilo, regresará en unos dias
El menor intentó ponerse algo feliz, algo que alone notó asi que decidio hacer algo
- Shun, por que no descansas, me has ayudado mucho estos ultimos dias, ve al bosque o al pueblo donde vive june, mereces tener un rato para ti
Al peliverde de le iluminaron los ojos en cuanto nombró que podia ir al bosque, asi que no dudó mas, aceptó la propuesta de su padre, tomo sus cosas para pintar y se fue corriendo como un niño pequeño, no sin antes que alone le recordara a que hora volver.
""""
En cuanto llegó al bosque comenzó a dar vueltas y a reir, como cualquier niño cuando hace algo que le gusta, tenia bastante tiempo asi que podria explorar grab parte del bosque, para ser apenas medio dia, por dentro el bosque era oscuro, la abundancia de arboles casi no dejaban pasar los rayos del sol, pero eso no lo atormentaba.
- ¿Que acaso no te quedó claro?- una voz de entre las sombras y los arbustos llamó al peliverde, este no se asutó demasiado ya que reconoció enseguida el tono
- Hola! Aamm...lo siento olvidé tu nombre
- mi nombre es lo de menos, que haces aqui- dijo acercandose
- Solo vine a dar un paseo, y me quedaré un buen rato aqui
- Es increible que puedas caminar- hablo refiriendose a la mordida en el pie de shun
- Sana rapido, o al menos en mi cuerpo segun mi padre
El rubio comenzó a caminar hacia el frente y el peliverde parecia seguirlo.
- ¿por que me estas siguiendo?- su tono sonó algo enojado
- Esque tambien voy para alla- dijo algo tembloroso- oye...estas herido de nuevo- señaló su espalda y sus brazos
- No importa
- por favor dejame tratarlos...- se quedó callado al no recordar su nombre
""""
- Egh- Ah, lo siento- dijo vendando los brazos del rubio- ...
- Hyoga..
- disculpa?
- Mi nombre es Hyoga, grabatelo por que no pienso repetirlo luego- cerrando los ojos puso su cabeza "mirando" a otro lado
Shun sonrió, le agradaba que las personas se sintieran bien con el y que podia confiar en ellas
- Hyoga...por que siempre que nos reencontramos estas herido?
- ...Solo entreno todo el tiempo
- creo que no deberias pasar tu limite, aunque tus heridas sanen rapido, creo que deberias tener mas cuidado
El rubio nisiquiera lo miró, solo seguia sentado con los ojos cerrados y con el ceño fruncido
- Gracias por dejarme que te atendiera- el rubio respondio con un "Mm"
-( Este chico ¿acaso esta loco para venir el solo aqui en el bosque?)
Si, estaba loco, o eso tal vez le pareció al principio, no hablaron mucho esa tarde pero hyoga experimentó cosas nuevas por insistencia de shun, tenia que, ya que si no lo hacia podia dar un paso en falso y tener que revelarle su secreto.
Estos encuentros se hacian mas recurrentes cada vez, y todas esas veces estos dos se llevaban mejor, la tensión del rubio bajaba, y su confianza hacia el peliverde se hacia mas grande.
Shun aprovechaba en apurarse a terminar las clases de pintura para poder ir con su nuevo amigo aunque sea unos momentos antes de que oscureciera, el jamás hiso eso antes, y nunca se imaginó que lo haria, ni con su amiga June le pasaba, pero habia encontrado una persona con la que de alguna extraña manera lo comprendia.
Aquellas tardes en la pequeña colina, observando el sol ocultarse mientras la brisa de la tarde movia y enredaba sus cabellos, esos hermosos momentos nunca serán olvidados.
Algo en el rubio crecia por dentro, lo cual no lograba entender, podia dominar una bestia de dos metros o incluso atravezar el pueblo en pocos minutos, pero todas esas cosas no se comparaban a lo que sentia en su interior, ¿acaso era una enfermedad?, se interrogaba cada dia y noche, pero no lograba hayar una respuesta concreta, su amistad con shun ya era de mayor confianza, tal vez preguntarle a el seria una buena opción.
Ahora se encontraban nuevamente en el bosque, sentados en el cesped contemplando los ultimos rayos del sol, el rubio logró observar como el pelo del menor intercambiaba de color con el sol, a lo que le llevó.
- Shun- el nombrado giró su mirada al instante para ponerle atención
- ¿por que tu cabello es de ese color?, he visto a los aldeanos de donde vives, la mayoria de ellos tienen pelo negro, castaño o incluso un tono rubio, pero eres el unico de ahi que tiene ese color tan inusual
El peliverde reflejó en su rostro sorpresa y ocultó su cabello con su capucha color café oscuro para luego abrazar sus rodillas.
- Ni siquiera yo lo se- respondio con su tono de voz bajo- por esto mismo... desde niño he recibido malos comentarios y burlas de los demas, solo por que mi cabello es verde...no significa que sea un monstruo
Al notar su mirada triste el rubio comprendio todo, el no habia lidiado con algo asi, y en el poco tiempo que llevaba conociendo a shun, con eso que le contó se le hacia mal y cruel que las personas le hicieran eso.
- Perdoname
Negó y alzó su cabeza- no tienes por qué, no has hecho nada- colocó una sonrisa que parecia solucionarlo todo
El sol se habia ocultado, solo unos pocos rayos permanecian, shun tenia que irse o de lo contrario su padre no lo dejaria volver ya que algunas veces llegaba tarde, no queria dejar al rubio con una sensacion de culpa asi que tuvo una idea
- Oye que tal si mañana te llevo a probar el vino del pueblo a donde voy a mis clases, no lo he probado, pero dicen que es muy bueno
- Claro, vamos
Se despidieron con una sonrisa y de nuevo hyoga quedó vagando entre el bosque preguntandose varias cosas respecto al chico.
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108个恶魔困在一颗高贵的心 [108 Demonios Atrapados En Un Corazón Noble]
Aventura"¿Qué es la belleza en esta tierra? No es el atardecer, ni las estrellas ni tampoco las gotas de rocío en las rosas La belleza es simple, delicada, fína, todo lo que tú eras. Pero toda estrella se apaga y contigo fueron más que crueles; nos impidier...