One shots - BLACKPINK

Anhelos

CHAESOO

Querida Jisoo:
Cuando vengas, prometo hacerte tan feliz que las lágrimas de tus ojos saldrán por si solas. Prometo hacer que las mariposas de tu estómago florezcan. Prometo decirte todos los días cuán hermosa eres, ver tus ojos y acariciar tu piel.

Quiero que seas feliz, aún que no sea conmigo. Al menos quiero ser parte de ti, poder tomar tu mano y abrazarte en las noches. Cuando te de miedo algo, quiero protegerte, quiero ser quien te quite el temor. Quiero acariciar tu cabello, decirte cosas al oído. Mirar tu rostro, y decirte que cada gesto que haces me lleva a las nubes.

Escribirte en una servilleta toda las mañanas que te amo, por que sabes, nunca hay papel para escribir en casa. Dejarte café, o chocolate caliente, el desayuno en la cama. Quiero ver tus cabellos revoltosos por las mañanas, tu ropa desalineada. Cuando el mediodía llegue, quiero acostarme contigo en el sofá y ver una película, comer palomitas y tomar tu cuerpo como si esté fuera mi oxígeno.

Quiero besarte, todo el día. A todas horas, por días, por semanas, por meses y años. Quiero tenerte, pero sobre todo quiero que seas feliz.

Siempre te dije que soy para ti, pero si tu no lo eres para mi, no hay problema. Por que puedo ser tu amiga, o hasta tu hermana, pero sobre todo, siempre estaré a tu lado. Aun que te enojes y me digas que solo me lastimas. Me gusta sufrir si al menos te veo. Se que estoy mal, pero no puedo evitar ver tu sonrisa y sentir cosas en mi cuerpo. Siento que floto, que vuelo y doy vueltas.

Se que te incomodará esta carta, se que lo será y no te causará absolutamente nada. No quise esperar hasta febrero para darte esta carta. Pienso que para una declaración de amor, no hay fecha. Pienso que para hacer feliz a alguien no se necesita de una festividad. Siempre tenemos que hacer feliz a una persona, bueno, no se si a ti te hice feliz. Tal vez no, tal vez si.

Por último, quiero decirte que, te quiero. Mucho. Muchísimo. Tengo ansias de verte, pero si decides no querer verme, esta bien. Lo entiendo. Cuando llegues a tu casa, un rosa azul te esperará en la entrada. Prometo hacerte feliz si me aceptas en tu corazón. Quiero ser parte de al menos, un pequeño trozo de tu historia.

Con amor, yo.

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Arrugue el papel, me dolía que ella me escribiera este tipo de cosas. Odiaba esto y lo sabía. Siempre me insistió y estuvo para mi, yo no podía corresponder sus sentimientos.

— ¿Estas bien? — el cuerpo de mi acompañante apareció por detrás de mi abrazando mi cuerpo.

— Si, necesito irme. — tomó mi abrigo, un mal sabor de boca inundaba sentidos. Necesito arrebatar esta sensación de ahogarme en un vaso de agua.

— Acabas de llegar. — sentencia inconforme.

— Si, lo se, no soy tonta.

— ¿Hice algo mal?

— ¡No! — grito, su cuerpo se estremeció hacia atrás. No encontraba mis llaves, sin ellas no podía irme. — ¿Mis llaves?

— En el buró. — responde a duras penas.

— Gracias, no vuelvas a buscarme.

Bajo de inmediato, no podia dejar esto así. Se que anteriormente me dije no corresponder sus sentimientos, pero simplemente no podía dejar de pensar. Desde que llegue, mis pensamientos trataron de perjudicar mi futuro poniendo su rostro perfectamente hermoso las veinticuatro horas de la semana.

No podía dejar de pensar en ella. No podía dejar de lamentar las veces que desperdicié mi tiempo rechazando cada oportunidad y palabras que salían de su boca respecto a nosotras negando rotundamente que algo existiera. Me sentía realmente culpable.