Stunning Edge ✔

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En este momento, por supuesto, Qi Aoshuang no sabía sobre el voto de Lila. Estaba caminando lentamente de regreso a su habitación.

En el dormitorio, el niño delgado, Wynes, aún no había regresado. Qi Aoshuang se acostó en la cama sobre su espalda, sintiéndose un poco cansado. Sus pensamientos estaban en un lío mientras pensaba en algunas cosas antes de finalmente caer en un sueño profundo.

Por la noche, Qi Aoshuang fue despertado por un sonido suave. Cuando se levantó, vio a Wynes sentado a la mesa, con la cara hinchada y la nariz hinchada, aplicándole medicamentos. Al ver que Qi Aoshuang se había despertado, Wynes pareció un poco avergonzado. –Lamento despertarte–, dijo suavemente. –La próxima vez  tendre mucho cuidado–. Hubo una disculpa genuina en la voz de Wynes.

–¿Que te pasó? –, Preguntó Qi Aoshuang de manera experimental. Después de todo, no todos podrían enfrentar ser golpeados así con calma. Si la otra parte no estaba dispuesta a hablar de ello, Qi Aoshuang dejaría de seguir con el asunto.

–No, nada. Vete a la cama temprano. Todavía tenemos que ir a clases mañana–. Efectivamente, Wynes solo logró sonreír y respondió con frustración. No dijo qué pasó exactamente con sus heridas.

Al ver esto, Qi Aoshuang no preguntó más. Si Wynes hubiera querido decirlo, lo habría dicho antes. Sin embargo, no quería que Qi Aoshuang lo supiera. Qi Aoshuang asintió suavemente y dijo: –Mm, deberías descansar temprano.

Wynes dijo que sí, y continuó aplicando la medicina, y luego se hizo el silencio.

Después de lavarse, Qi Aoshuang volvió a dormir.

A la mañana siguiente, cuando Qi Aoshuang se despertó, Wynes ya no estaba allí. Qi Aoshuang miró la casa limpia, sumida en sus pensamientos.

Cuando llegó al aula, Qi Aoshuang notó que la clase de la división Viento estaba escasamente llena de gente. Después de todo, no había muchos estudiantes de primer año esta vez. Wynes se sentó en un rincón, perdido en sus pensamientos, como si estuviera pensando en algo. Ni siquiera se dio cuenta de que Qi Aoshuang estaba sentado a su lado.

La campana para la clase había sonado, pero aún no había ningún maestro. Después de más de diez minutos, finalmente apareció una figura temblorosa. Un anciano que ni siquiera podía caminar de manera estable sintió que estaba retrocediendo tres pasos. La caminata desde la puerta al podio pareció tomar mucho tiempo. Todos estaban preocupados de que cayera al suelo en el momento siguiente.

Cuando finalmente llegó al podio, el viejo dejó el libro y lo abrió con un ligero temblor. Entonces, comenzó a dar una conferencia. El conocimiento que dio fue todo relativamente básico y no sobresaliente.

El sonido de la conferencia se hizo más y más suave, hasta convertirse en un ronquido.

Todos se sintieron avergonzados.

Este maestro se había quedado dormido.

–¿Profesor, maestro? – El estudiante sentado enfrente no pudo evitar gritar.

El anciano se despertó de repente, se limpió la saliva de la esquina de la boca, miró a las personas en el salón de clases, luego parpadeó sin comprender y dijo: –Oh, la clase ha terminado–. Sin esperar ninguna reacción de los estudiantes, salió del aula con el libro en la mano. Dejando atrás a un grupo de estudiantes mirándose con consternación.

Solo así, la clase terminó sin ningún motivo.

Algunos de los estudiantes en el aula eran desdeñosos, mientras que otros estaban profundamente pensando. ¿Podría ser que los maestros de la Academia Estrella fueran realmente así?