Tu diario

IV

Perdí...otra vez perdí, mi sonrisa...esa que me ayudaste a recuperar una vez, las ganas de vivir que se habían esfumado pero que trajiste contigo, mi voz...esa que solo sabia pronunciar tu nombre, la que solo tu escuchabas, el brillo en mi mirada...el que apareció cuando te conocí y se intensificaba con el pasar de los días, mis sueños de calma se volvieron pesadillas otra vez.

Otra vez perdí, la confianza en mi, la que decías que era importante para evitar que me hirieran tan fácil, los momentos llenos de alegría que pasaba junto a ti...esos que ahora solo existen en mis recuerdos...recuerdos que no volverán.

Volví, volví al primer escalón pero...esta vez no puedes ayudarme a avanzar, esta vez depende de mi y no puedo, no puedo seguir, dos meses fueron suficientes para destruir lo que construirse en seis años, dos meses siendo torturada por sentir amor, aun siento aquellas descargas eléctricas recorrer mi cuerpo, aun recuerdo cada vídeo que me obligaron a ver, aun lo recuerdo a el.

¿Como pudieron ser tan crueles?¿como pudo enviarme a ese lugar sabiendo lo que me harían?¿acaso no sintieron compasión? ¿porque el no se detuvo a pesar de mis gritos y suplicas?, eran mas monstruos que yo.

No se puede romper algo que ya esta roto, que equivocada esta esa frase, pero no culpo a su creador pues...todos tenemos distintos puntos de vista, cada quien la ve desde su propia perspectiva.

Todo volvió a ser gris, las horas pasan mas lento de lo normal pero por alguna extraña razón los días se van en un parpadeo, las pesadillas no me dejan en paz impidiendo que logre dormir mas de dos horas seguidas.

El tiempo lo cura todo pero...¿cuanto tiempo debo esperar?.

Es de noche otra vez y luego de tomar una pastilla para conciliar el sueño voy a mi cama sólo para quedar atrapada en una pesadilla mas.

Me encuentro en ese lugar al que tanto le temo, si, la habitación número trece de aquel reformatorio, me encuentro bragas tirada en aquel suelo frío mientras el se prepara para iniciar el acto mas cruel que se le puede hacer a cualquier ser humano, sabes que es inútil pedir ayuda, sabes que si te resistes es peor pero igual lo haces.

Al pasar alrededor de unos quince o veinte minutos sale de la habitación dejandome asustada, sucia y adolorida,  nunca había deseado estar muerta con tanta intensidad como en ese momento.

¿Que sentirías tu si me deseo se hace realidad?
¿Seras capaz de perdonarme?.