Finalmente miércoles, por alguna extraña razón había despertado con cierto tipo de dolor en la cabeza posiblemente migraña, las cobijas de la cama me parecían más pesadas que de costumbre no tenía ganas de hacer ejercicio o siquiera bañarme, quería pasarme el resto del día en mi habitación durmiendo. Sin embargo eso no podía ser tenía por obligación reclutar a otros 5 estudiantes más para poder formar el equipo para el torneo por fortuna se me hizo más fácil juntar a los primeros que eran mis amigas del club que sin pensarlo decidieron ayudarme. Lentamente comencé a quitarme las cobijas de encima y me levanté de la cama, aún con algo de dudas en mi mente comencé con mi entrenamiento matutino
Jin: supongo que está vez serán 50 dragón flags
Dicho esto me acosté en el piso boca arriba y sujete con ambas manos una de las patas de mi cama, una vez hecho esto levante complemente mi cuerpo en forma vertical usando de apoyo únicamente el piso en el que estaba acostado, prácticamente cumplí con el primer dragón flag y lentamente descendí mi cuerpo nuevamente hasta volver a la posición original y consecutivamente comencé a realizar las 49 que aún me faltaban
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Una tras otra las terminaba difícilmente realmente era agotador mi estómago sentía el dolor que causaba el solo hacer esa clase de ejercicio y lo peor aún, era que contenía mi respiración por varios segundos, realmente me estaba sobre exigiendo a mi cuerpo llevandolo a tales extremos en el que no podía comprender o amenos así lo creía. La verdad es que siempre que despierto tengo la rara sensación de ser lamido por el perro estúpido y utilizo el ejercicio solo como una forma de escape para poder olvidar esas extrañas sensaciones que recorren mi cuerpo día tras día
Jin: no puedo creer que siga así todas las mañanas, porque mierda aún no sale de mi Mente porque sigo recordando eso
Hablaba en voz alta cómo si esperara que alguien por alguna razón me diera una respuesta a mis extraños comportamientos, sudaba a más no poder mientras terminaba con el último dragón flag. Rápidamente me lavante del suelo viendo cómo gotas de sudor recorrian todo mi cuerpo
[Toc toc toc toc toc]
Antes de darme cuenta alguien comenzó a tocar la puerta de mi cuarto
Jin: ¿Visitas? ¿A esta hora?
Me dirigí hacía la puerta de mi habitación y la abrí sin pensarlo dos veces
Kushida sensei: hola Jin ¿Te impor? Kyaaaa
Antes de que kushida sensei terminara de hablar tiró los libros que tenía en sus brazos y se tapo los ojos con ambas manos para después dar un pequeño gritó, ví claramente como un pequeño sonrojó se formaba en su rostro
Jin: ¿Kushida sensei? ¿Que hace aquí?
Ante el extraño comportamiento de kushida, decidí preguntarle acerca de su visita
