Suficiente, Amor

Despedida

A partir de ese día, nada fue igual.

Shen Qingqiu vagaba de un lado a otro con total libertad, Luo Binghe de igual manera dejó de ser pegajoso y ya muy pocas veces se asomaba en el pico Qing Jing

Poco a poco, aquellas almas totalmente inseparables iban perdiendo sus lazos.

Un día Yue Qingyuan decidió hablar el asunto con Shen Qingqiu, no era solo por que le preocupara, sino por que los discípulos habían estado tan inquietos por lo sucedido que no dejaban de cometer errores a diestra y siniestra.

La charla, había comenzado relativamente bien, hasta que Yue Qingyuan quiso usar su voz calmada para hacer entrar en razón a su Shidi o al menos encontrar la razón de sus acciones.

"Shidi"

"¡Suficiente! No voy a quedarme aquí a discutir eso contigo"

"Shidi, él es tu esposo, los discípulos te han visto muchas veces ir a esos lugares" tosio "en estos días"

Shen Qingqiu sonrió.

"¿Y que tiene que seamos pareja? Yo nunca digo nada cuando él no se aparecía en días enteros por estar en el mundo demoníaco"

Yue Qingyuan abrió los ojos, ¿estaba haciendo todo ese berrinche por celos?

Estaba a punto de alzar la voz nuevamente, cuando una voz más agria se coló a la conversación.

"Sí tanto le desprecias ¿Por qué demonios te casaste en primer lugar?"

Era Liu Qingge, harto de todo el drama que ellos dos podían generar estando separados. Tal vez lo que esperaba de Shen Qingqiu en ese momento era que reconsiderase su posición, el como se veían ante los discípulos con esa actitud suya y como todo podía volver a la normalidad si tan sólo se sentará a pensar en sus acciones cinco minutos.

Pero, era como si el anterior Shen Qingqiu hubiera vuelto. Tomó el abanico de papel de su mesa, lo extendió sobre su rostro y sin decir nada se marchó del lugar.

Yue Qingyuan y Liu Qingge, no lo volvieron a ver por el resto del día.

Los discípulos de igual forma, últimamente siempre vigilaban a su Shizun, con la vaga intención de que este se diera cuenta de ellos o al menos no hiciera locuras. Pero todo era en vano, a Shen Qingqiu le importaba poco que los discípulos le miraran a todas horas.

Un día incluso, todos los discípulos se pusieron de acuerdo para recolectar regalos que pudieran gustarle, se lo darían de buena manera en nombre de Luo Binghe, pero nadie se esperó que Shen Qingqiu rechazará todos y cada uno de ellos.

"¿De verdad creen que soy tan tonto como para creer que Luo Binghe me daría algo, después de como lo he tratado?"

Los discípulos supieron que no era del todo inconsciente de sus actos, la verdadera pregunta que tenían era: ¿Por qué lo hacía entonces? Pregunta que nadie podía responder.

En el mundo demoníaco las cosas no iban mejor.

Shang Qinghua y Mobei-Jun eran los más cercanos a Luo Binghe, por lo que muchas veces visitaron el palacio, solo para encontrar a un Luo Binghe de ceño fruncido revisando los documentos que ameritaban su atención.

Iba y venía sin retrasos, sin dejar de mostrar esa amarga expresión, incluso si muchas veces le habían visto dar todo su empeño por terminar los deberes y volver a casa, en ese momento era como si no quisiera volver.

"DaWang" susurró Shang Qinghua una vez que estuvieron solos "¿Qué pasa con Luo Binghe? Normalmente siempre tiene prisa pero ahora..."

Mobei-Jun no era un ser de muchas palabras, solo su mirada podía decir mucho, aun así para Shang Qinghua él hizo un esfuerzo.