S E I S

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-Yuta... ahhh... – Jaehyun escuchó gemidos desde la habitación de Taeyong – Tienes manos doradas...

-Qué diablos... – Jaehyun maldijo apoyando la oreja en las puertas.

-Tu piel es tan suave y perfecta...

-Más... – gimió Taeyong.

-Maldita sea, Japón... estás provocando que Corea envíe este chico yaoi – murmuró Jaehyun y abrió las puertas listo para estrangular a Yuta hasta la muerte.

Para su sorpresa, las cosas fueron un poco diferentes.

-¿Por qué entras sin llamar? – preguntó Yuta, después de que dejó de masajear la espalda de Taeyong.

-La cena está lista – Jaehyun le dio una mirada de muerte a Yuta, cuyas manos todavía estaban en la cintura de Taeyong.

-Estaremos allí pronto – dijo Taeyong sin aliento.

-Me voy a vestir para la cena – dijo Yuta y besó el hombro de Taeyong, haciendo que Jaehyun soplara fuego por la nariz como un dragón.

Yuta no dejó la habitación por completo, cuando Jaehyun cerró la puerta haciendo que Yuta cayera de bruces frente a la habitación.

-¿Puedes darme un poco de agua? – preguntó Taeyong, reuniendo fuerzas para levantarse.

-Claro – Jaehyun sonrió, y salpicó a Taeyong con agua de la jarra – Ahí tienes – sonrió Jaehyun – Tu cuerpo estaba en llamas después de las manos doradas de Yuta.

-Oh... Entonces ese es el problema – Taeyong se limpió la cara – ¿Tienes algo en su contra?

-No. De ningún modo. Todavía no encontré nada.

Taeyong solo rió apoyándose en la almohada.

-Buscame algo de ropa.

...

Jaehyun no podía mirar a Yuta alimentando así a Taeyong. Actuaban como una maldita pareja.

"¿Por qué me importa?", Jaehyun pensó al sentirse molesto.

-Más vino, por favor – le ordenó Yuta a Jaehyun – Y esta comida... juro que pude ver pelo en ella...

-¿Es eso así? – Jaehyun arqueó las cejas.

Taeyong estaba comiendo, así que no les prestaba atención.

-Sí – Yuta miró a Jaehyun, pero el sirviente se negó a creer.

-Te ves mejor... – Jaehyun golpeó la parte posterior de la cabeza de Yuta, haciéndole mostrar la cara en el plato – Oh, ¿estás bien? – preguntó Jaehyun a Yuta con sarcasmo.

-Tienes sarcasmo por toda la cara.

-Tienes comida, pero no te lo señalo.

-¡Tú me hiciste esto!

-¿Alguna evidencia?

-No la necesito, mi palabra es más grande que la tuya, campesino.

Taeyong dejó de comer, mirándolos.

-Jaehyun, discúlpate con él.

-¿Disculpa?

-¿Tanto quieres iniciar una guerra entre Japón y Corea?

-Lo siento mucho – Jaehyun miró a Yuta – Prometo que lo haré mejor la próxima vez.

Yuta tragó saliva.

-Eso suena a advertencia, pero está bien – Taeyong siguió comiendo.

...

-¿Estas bien? – preguntó Doyoung a Jaehyun, él era el chef principal de la cocina.

-Sí – Jaehyun se calmó un poco – Simplemente no lo entiendo... ¡¿Por qué demonios es Yuta tan especial?!

-Ya veo... – Doyoung escondió una sonrisa – Yuta es el amigo de la infancia de Taeyong. Viene de Japón todos los años, para pasar tiempo con Taeyong.

-No tengo nada en contra de Japón, solo Yuta – Jaehyun frunció el ceño.

-¿Por qué? Es tan amable... – se burló Doyoung.

-Él es... solo... uh – Jaehyun se sentó y cruzó las manos.

-¿Tal vez estás celoso, porque Taeyong está sobre Yuta? – Doyoung lo señaló.

-¡No! ¿Por qué lo estaría? – espetó Jaehyun – ¡Odio a Taeyong! No me importa si se alimentan, se abrazan o se besan. Estoy totalmente bien al respecto. Odio a Taeyong por completo.

-Si tú lo dices... – dijo Doyoung, antes de llamar a Johnny por la ventana – Johnny, ven aquí a comer.

Jaehyun se cayó de la silla cuando una cabeza de jirafa apareció en la ventana.

-¿Johnny? – El rostro de Jaehyun estaba pálido.

-Si. Es la mascota de Taeyong – confirmó Doyoung.

Jaehyun continuó mirando a Doyoung.

-Una jirafa...

-Conoces a Taeyong, él ve algo en la foto y debe ser suyo – Doyoung puso los ojos en blanco.

-¿Por qué Johnny?

-Oh, me recuerda a mi ex – suspiró Doyoung – Son como de la misma altura, y su cara es idéntica cuando comen.


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NOPE - Jaeyong (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora