Polideuces

1.-Único.

Nacer primero es un privilegio dicen unos.

Nacer segundo puede ser que te relegue a las sombras o asumir el primer lugar en caso extremo.

En una zona de algún país, dicen que cuando nacen gemelos, el que nace al último es el mayor ya que fue concebido primero...

En la gran mayoría de las culturas modernas, aquel gemelo o mellizo que nace primero es el mayor.

En ciertas culturas antiguas, los gemelos eran sinónimo de buen augurio o un favor de los dioses...Pero en el santuario de Athena, el gemelo nacido después, era sinónimo de mal augurio, aquel que tenía una sombra en su estrella guardiana, el maldito...

Rómulo y Remo, los gemelos relacionados con Roma, hijos de Marte y una virgen sacerdotisa, tarde o temprano discreparían... Rómulo mató a Remo; en el otro lado de la línea, Saga y Kanon discreparon, el" mayor" encerró al menor para que ese corazón oscuro olvidara su malicia.

El despreciado por la mitología de géminis no se sentía orgulloso de su lugar, no tendría derecho a vestir otra armadura que la del oprobio y el ocultamiento forzoso. Como un animalito debía vivir sus días, mientras veía como las técnicas y entrenamientos eran otorgados a los " elegidos".

Kanon odiaba a los dioses.

Kanon sentía que a veces se odiaba a si mismo y odiaba a Saga, el cual tenía todos los privilegios por ser el mayor, por ser el primero en salir del vientre de una mujer cuyos ojos fueron el imán de algún hombre que la conquistó y de cuyo romance nacieron ellos dos. 

Saga... el bondadoso, el ángel enviado por la diosa de los ojos de lechuza...

Kanon... el sociópata, el demonio expulsado de las profundidades por Tártaro para desestabilizar el equilibrio entre dioses y elementos...

¿ Y si ciertos humanos son dioses caídos?

 Y si los humanos más poderosos y venerados por sus habilidades intelectuales, psíquicas y don de gentes son seres que en un plano más avanzado fueron expulsados de sus dominios por otros dioses que celosos de sus dones, los echan a un mundo que ellos consideran, básico y sin importancia.

Kanon desde que llegó al santuario fue un apestado, un paria que no tenía derechos por ser considerado una sombra de Saga, el magnánimo.

Ker maligna y traviesa fue la causante de todo, manipular destinos y hacerlos desdichados. 

¿ Quién de los dos gemelos sufrió más por ese macabro juego?

La respuesta mayoritaria sería Saga. La minoritaria diría Kanon.  

Jamás entendió esas leyes discriminatorias, si eran gemelos, fácilmente podrían ser aceptados y podrían complementarse perfectamente a los entrenamientos por la armadura y ella sin dificultades, vestiría a ambos.

—¡Saga!—llamó una vez angustiado, siendo un infante de ocho años—¡Hermano!

Con desdén, el aludido lo miró desde su posición mientras sostenía una liebre herida que escapó de sus manos, Kanon sin quererlo, fue corriendo tras la liebre la cual vio una tarde mientras salía a buscar una frutas que le gustaban, a escondidas de su hermano. El menor de los gemelos tenía hambre y la comida, su embriagante aroma no llegaba a su olfato y decidió contraviniendo las órdenes de su hermano, salir y buscarla.

—¡Te advertí! ¡ Pero siempre haces lo que te da la gana!

Kanon calló dolido por la dureza de esas palabras, bajó la mirada y se tragó sus protestas. Saga le dio la espalda y caminó en silencio.

—¡Actúas como ellos!—acusó irritado por la falsa corrección de este—yo no soy una maldita e impertinente sombra...¡ Que te quede claro!

No era segundón, se repetía, se consideraba el primero también.

Si salieron de la misma mujer el mismo día... El tiempo no existe, se consolaba, sólo era una burda y pueril estación que Cronos deseoso de vengarse por haber sido destronado, imponía a la fugaz humanidad.

Kanon por eso, odiaba a los dioses. Y él era uno, un caído que también se odiaba a si mismo, odiaba que esa ínfima inmortalidad lo atara a rendir pleitesía a una deidad que a fin de cuentas lo protegía en silencio, una deidad a la que no le importaba las primogenituras ni lugares de nacimientos.

Adolescente, adquirió los rasgos de lo que sería un hombre hermoso, pero aquejado por la ira. Día y noche guarecido en su lugar, ideaba planes de destrucción en los que la bondad no tenían un espacio en su reino ideal.

Villano o un incomprendido.

Antihéroe mejor.

Un antihéroe que se forjó manipulando al Agitador de los mares.

El otrora villano que se sentía minimizado ante los comentarios de que Saga era más fuerte que él y que sucumbía al amargo odio que lo condenó a sufrir la purga dolorosa de Antares. El otrora villano que ni con su vida pagaría el mal que causó como General Marino, decidió dejar de odiar  a ciertos dioses y humilde cargar con el honor de ser reconocido como un guerrero con el manto dorado de los Dioscuros.

Athena, como buena estratega, supo incorporarlo a su mermado ejército. Athena tan sabia, sabía como luchar, Athena no era inútil y eso él lo sabía...

Ahora era un igual ante Saga.

Radamanthys, el rival más formidable al que pudo enfrentarse, representó su último reto. Altivo, gallardo se dispuso a finiquitar esa misión. Tal como los gemelos divinos, Cástor y Pólux, el mortal e inmortal, Kanon decidió compartir la partícula de esa vetada inmortalidad con el mortal Saga quién en esos momentos renacía por voluntad de Athena.

Polydeuces o Pólux titiló con intensidad desde su posición en el cosmo, deseoso de ver la hazaña del etiquetado como " la sombra, el segundo".

Kanon, el segundo, el dios caído, nacido para desdicha en un lugar poco privilegiado, entregó géminis a Saga que lo recibió gustoso. Luego con su cuerpo desprotegido y con su cosmo ardiendo de gozo por derrotar las fuerzas del dios de inframundo, ejecutó su postrero ataque, llevándose la existencia de Radamanthys y la suya propia.

Apenas unas palabras sentidas antes de extinguirse su vida y fusionar su alma con la de Saga, dirigió a sus semejantes.

Kanon odió a los dioses y a si mismo por el sitio destinado entre los humanos.

Sagaz e inteligente, ya no el segundo ni la sombra.

Nunca fue un ser acervo, nunca fue un demonio expulsado de las entrañas de la tierra. Fue un caído que no aceptó ser segundo.

Odiar fue su alimento.

Arrepentirse su última cena.

o-o-o-o-o-o

El mito de los gemelos divinos, Cástor y Pólux todos los conocen, en realidad siempre imaginé que Pólux era un nombre de origen griego, pero investigando supe que era el nombre dado en Roma; por lo tanto en griego lo llaman Polideuces  cuyo significado es " muy dulce"

En astronomía, la estrella Pólux recibe un nombre árabe Al-Ras al-Tau'am al-Mu'akhar (الرأس التؤام المؤخر), cuyo significado es " la cabeza del segundo gemelo"

También, los Dioscuros tienen el epíteto de " Afeterios".

Es sólo un pequeño fic sobre el gemelo de Saga, aunque falta para su onomástico, cualquier día es bueno para escribir sobre ellos :D