sueño inesperado (AURYN)

Capitulo 24

Narra Lorena

Salimos del starbucks riendonos, casi llorando.

Que porque, por la simole razon de que carlos y dani habian montao una escenita en la tienda donde trabaja alba, y ademas tiene pruebas. Les había hecho una foto a traición.

Cuando llegamos a casa, nos tiramos en el sillon. Estabamos agotadas, habia sido un dia duro. Y lo peor... todavía no había acabado. Aun quedaba la tarde-noche con los chicos. No había muchas ganas la verdad, pero tampoco es que no quisieramos ir.

Después de estar un buen rato tiradas haciendo el gamba en el sillon, decidimos irnos a preparar .

Subí a mi cuarto y nada mas entrar, vi a una de mis mejores amigas. Pensaréis que todas nosotras estamos muy locas, no os voy a decir que no. a lo que iba. Vi a mi tan blandita y acojedora cama pidiendome que me quedara con ella. Tenía ganas, pero no era lo correcto, asi que con mucha lastima me dirigí al armario a cojer la ropa que me iba a poner.

Me decanté por unos leggins negros con un poco de cuero, una camiseta de tirantes basica negra, una chaquetita marron clarito y unas vans del mismo color.

Baje y alli estaban Lucía, Andrea y saray tiradas en el sillon como hace unos minutos estabamos, pero ya estaban cambiadas, algo... es algo, mientras que alba estaba con su perra perla mientras que miraba su movil.

Lorena: bueno... nos vamos?

Alba: si, camone

Saray: que cansancio -dijo mientras se levantaba y bostezaba

Salimos y de nuevo nos volvimos a montar en mi coche.

Narra Saray

Estábamos llegando a hyde park. La verdad que todo estaba bastante bonito, ya que todo estaba recubierto de esa fina capa de nieve que inundaba las calles.

Quedaban 19 dias justos para navidad. Todas las tiendas estaban de rebajas y andar por el centro era una locura.

Cuando porfin conseguimos llegar al punto acordado, no había nadie.

Lucía: luego nos dicen a nosotras -dijo quejandose mientras se cogía los codos debido al frío.

Iba a hablar justo cuando noto un fuerte y frio impacto en mi costado derecho.

Saray: ahh quien a sido -dije imtentando de hallar al culpable

Lorena: me parece que ha sido un rubiales de ojos azules -señalo con la cabeza a algo que se encontraba a mis espaldas

Me giré a comprobar de que se trataba y como no... era dani

Saray: asi que... has sido tu -me agache y recogi un puñado de nieve

Dani: yo... yo no e echo nada, soy un angelito -dijo con ironía mientras señalaba una sonrisa que se le formo en la boca de niño bueno . D forma al puñado de nieve que coji anteriormente

Saray: pues como te has portao tan bien, no crees que mereces un obsequio?

Dani: no tranquila no hace falta -dijo alejandose mientras ponia las manos delante suya

No espere mas , le tire la bola de nieve ue tenía preparada expresamente para el, pero se ve que la suerte no esta de mi lado, ya que se agacho y no le dio a el, sino que le dio a David.

David: ohh te vas a enterar -cogio un puñado de nieve y le dio forma.

Me la tiro pero afortunadamente no me dio a mi, pero Alba no corrio esa suerte, ya que su pelo quedo completamente blanco

Narra Alba

Sin darme cuenta, en menos de un segundo tenía el pelo totalmente cubierto de nieve. Me gire a ver al culpable y me encontre a un Carlos usado de escudo ,en el cual detrás estaba el culpable a todo esto.

Cogi una bola y sin importar a donde fuera la tire y calló en la cara de Carlos.

Sin decir nada, me encontraba corriendo por mitad del hyde park siendo perseguida por un enfadado Carlos, el cual tenía todavía un poco de nieve en la cara

Carlos: te cojere. Y lo sabes

Alba: si no corres un poco mas no lo podras hacer por mas que lo intentes.

Carlos :eso ya lo veremos.

Yo segui corriendo sin preocupaciones cuando alguien se tiro encima mia haciendome caer al frio suelo.

La verdad no estaba tan duro como me imaginaba, la nieve ayuda mucho contra estas situaciones

Carlos :aja ! Te coji -dijo lo ultimo seductoramente

Alba: ha sido por pura suerte y ademas en lo ultimo ya me e cansao y e reducido el paso para poder dejarte ganar

Carlos: si,si, pero te atrape

Alba: que sepas que la bola iba dirigida a David

Carlos : pero a a acabado en mi preciosa y delicada cara -dijo tocandose esta

Alba: si, lo que tu digas -cuando lo termine de decir me di cuenta de que estabamos a una distancia un tanto... peligrosa