Promise

La verdad

10 años después:

Estaba entrando en el estadio para ejercitar, cuando vi un montón de chicas preparadas como yo para hacer ejercicio, pensé que iba a hacerlo sola.

-Lo siento-dijo el entrenador-Me voy en tres semanas y todas las citas las traje para hacer más rápido, espero que no te moleste.

Conocía a Andrew (mi entrenador) desde hace tiempo, ya éramos amigos, no le podía decir que no.

-No, para nada-dije-Total somos todas chicas.

-Sobre eso-dijo Andrew-Hay un chico.

-Está bien-dije sin ánimo-Puedo con eso.

Nos reunimos todas y el chico se puso al lado mío. Andrew dio las instrucciones para hacer y a lo último para terminar teníamos que trotar por la cancha.

Empecé a trotar, el chico nuevo me empezó a hablar, me caía bien. Cuando terminamos de correr seguí hablando con el chico y cuando estábamos terminando de hablar y estaba listo para irse, me iba a abrazar pero antes escuche un grito de la platea. Era Edward. Todos se dieron vuelta y lo vieron, el chico se fue sin despedirse. Subí corriendo y se notaba que antes de que yo entrenara el había estado entrenando duro con su equipo para ganar.

-¿Quién era él?-dijo acercándose y besándome.

-No lo sé-dije-Un chico que conocí entrenando.

-Solo un chico-dijo-¿Segura?

-Si-dije, me estaba acercando para besarlo cuando veo que corre la cara para ver algo.

Veo hacia la cancha, era Sarah, entrenando. Esa chica me caía muy mal, y más sabiendo que Edward, la amaba también.

Ella le tiro un beso, y Edward hizo que lo atajaba. Pero tenía que aceptar las cosas por como son, no nos amábamos, nunca nos amamos, solo estábamos juntos hasta tener un hijo como mínimo y ese seria nuestro fin. No podíamos no aceptarlo, era algo que llevamos escrito en nosotros desde antes de nacer. Algo que nunca habíamos aceptado y que no podíamos cambiar por culpa de nuestros padres. Edward bajo corriendo para a ver a Sarah, con esa mini-mini-muy mini falda y ese top para levantarla por los aires y demostrarle cuanto la “amaba”. Yo simplemente al no poder ver tal cosa, me fui.

     Pero antes de irme recordé que las llaves del auto las tenía él. Así que me quede a hablar con sus mejores amigos del grupo de futbol. Todos me caían muy bien ya que estaban juntos desde que se creó el equipo. Andrew mi entrenador era uno de ellos, Edward no me dejaba tener ningún entrenador, cocinero, amigo, amiga que él no conociera. Era muy celoso.

-Hey-dijo William, me habría visto llorar-¿Otra vez?

Asentí con la cabeza, que se suponía que hiciera, no me gustaba ver a Edward con otras chicas enfrente de mí.

-Si tanto te molesta-dijo-Porque no haces lo mismo que el te hace.

-No podría-dije.

-¿Lo amas?-pregunto.

-No-dije-Pero me crie con él y es la única persona a la que ame.

-¿Y porque no tienen los hijos y ya?-dijo James.

-Tiene razón ya no tendrías que sufrir mas-dijo Jav.

-Pero, no puedo-dije.

-¿Porque?-dijo Andrew