Capítulo 3

25 4 1
                                    

Entró a la cocina ya estaban levantados Drake y Josh, se sonrojó al recordar lo que le había dicho Dimitri antes de salir del baño, a lo que él sonrió por darse cuenta de lo que estaba sucediendo mientras que los otros dos se miraban algo desconcertados aunque con una mirada cómplice intentando descifrar o tener una idea.
- Buenos días! - dijo mirando a todos los chicos, ser la única mujer a veces era complicado.
- Buenos días. - dijeron casi al unísono mientras que Dimitri no pronunció palabra alguna.

Se acomodó en la banqueta para desayunar un café con leche con un pan con manteca.
Cortando el silencio hablo Dimitri dirigiéndose a Lexa.
- Hoy tenemos que entrenar. - Su voz era con una seriedad particular, quizá hasta un poco preocupado.
- Es necesario? - dijo aunque sabía cuál era la respuesta.
- Si, vas a entrenar con los 3. - Su cara de desconcierto le permitió explayarse más. - A cada uno se nos da mejor algo, a Josh la fuerza, Si bien Drake hace magia el podría ayudarte a manejar tu estado de ánimo o humor en situaciones extremas y yo soy el más rápido y tendrás que ganarme.
- ¿Es broma verdad? - dijo un poco riéndose hasta que noto que no había ninguna sonrisa. - Está bien, pero quiero empezar con Drake.
- Perfecto. - asintió Drake con una sonrisa amable.
De los tres era el que con más afinidad sentía, el más sensible, si bien con Dimitri tenían algo, Drake era lo más parecido a un amigo.
- Nos vemos en una hora. - me dijo y se alejó hacía el bosque.

Procedió a darse una ducha mientras pensaba en cómo se supone que ella podría ganarles siendo que los tenían años viviendo así, conociendo su situación y que ella apenas sabía lo que era, tenía muchas dudas pero si eso no era suficiente debía enfrentarse con la loca ex del que le gustaba, tenía el cartón lleno, todas las de perder aunque si hay algo que la motivaba era que no le gustaba perder a nada.

Se adentro al bosque buscando a Drake y escucha una voz en su cabeza.
- Estás pérdida? - la voz era conocida pero no sé terminaba de acostumbrar ni a reconocer de quien era.
- ¿Quién eres?
- Ouch, vivimos juntos y no me reconoces la voz?
- ¿Drake? ¿Qué haces en mi puta cabeza?
- Entrenandote a que manejes ese temperamento y veo que tengo que hacer mucho trabajo.
- Pretendes que no me altere sabiendo que estás en mi cabeza?
- Si, porque esto te puede costar la vida.
- De que estás hablando?
- Encuéntrame y te lo digo.
- Drake no puedes hacerme esto.
- Usa tus sentidos y encontrame Lexa. Quieres respuestas? Encontrame.

La voz se fue de su cabeza, ella quería respuestas más que nada en el mundo, aunque sea poder conseguir alguna le daría algo de paz o al menos eso creía.
En su cabeza lo único que pensaba en cómo podía encontrarlo con sus sentidos, en cómo se hacía eso.
Se sentó en el bosque en una piedra un poco frustrada porque no entendía como podía hacerlo y aunque le parecía algo extremadamente estúpido, cerró los ojos e intento ver cómo lo podía hacer, pensó en Drake en sus rasgos, perfume, lugares, pero nada sucedía.
Sintiéndose inútil se acostó en el césped, mientras jugaba con sus manos a arrancarlo, cerró los ojos intentando localizarlo y de repente apareció una imagen en su cabeza donde se podía ver a Drake sentado en un árbol a lado de un río.
No sabía cómo lo había hecho pero lo logró y ahora iba a poder obtener respuestas.

Mi perdición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora