Em troca de uma coisa.

Oito.

                    Narración de Jungkook.

Cuando el pequeño híbrido estuvo completamente desnudó frente a mi no pude evitar mirar cada detallé de su perfecto cuerpo, podía notar que mi mirada le incomodaba, bueno hasta yo me incomodaría si un completo extraño me estuviera follando diez veces por minuto en sus pensamientos. Aunque realmente no sabría que estuviera pensando.

—Aqui.

Señalé la tina la cuál contenía agua tibia mientras desviaba mi vista a la anterior mencionada (si quería follarmelo, primero tendría que ganarme su confianza.)

Al parecer el chico no me entendía y bueno era obvio el por qué, el que no sepa hablar es mas que suficiente. Que ternura. Me acerqué para poder pasar mi brazo bajo sus piernas y así cargarlo, su pequeño cuerpo reaccionó inmediatamente, el pequeño había pasado sus brazos por mi cuello como si nunca nadie lo hubiera cargado, ahora estaba en una duda existencial pensando en que les hacían en aquel lugar obsceno a las criaturas como el. Caminé dónde estaba la bañera para dejar su cuerpo dentro del agua con cuidado, al principio negaba bruscamente con la cabeza sin embargo cuando su piel tocó el agua tibia poco a poco fue accediendo hasta quedar completamente dentro de ella.

¿Era por qué es un gato o tendrá un posible trauma con el agua?

Tome uno de los envases el cual contenía jabón de burbujas, no creo que el pequeño hubiera tenido en su vida un baño de burbujas debido en el lugar que se encontraba, por lo que quería que su primer baño en esta mansión fuera especial. Verti del jabón líquido en el agua a lo que el otro solo ladeaba su cabeza notando como en su rostro se asomaba la curiosidad, definitivamente era la primera vez que el chico vería una burbuja. Con mi mano hice movimientos en el agua para poder disolver y revolver el jabón con ella, no tardo mucho cuando el pequeño ya miraba con total asombro las esferas transparentes en su bañera y tocando su cuerpecito. Al principio parecía estar un poco asustado por la espuma y burbujas pero podía notar que también le gustaban, sus manos se juntaron así agarrando de las burbujas, parecía que ahora se sentía parte de ellas. Me las mostró como si quisiera compartirlas conmigo a lo que solo reaccione con una sonrisa no muy notable.

—Ahora quiero ser una burbuja para poder tocarte.

Volviendo al presente.

—Jimin, sabés que no debes entrar a la habitación de una persona sin mates tocar.

—¡Si toque! ¡Toque tres veces Hyung!— menciono mostrándole tres de sus deditos pequeños a Taehyung.

— Yo no te escuché.

J: Yo tampoco.

T: Yo sí.

Un chico delgado, rubio y piel bastante pálida se encontraba entrando en la habitación por detrás de Jimin después de decir aquello, nadie se había dando cuenta que una persona acompañaba a Jimin, ni siquiera el mismo.

—Taemin, realmente a veces me asusta tu sigilo. — dijo Taehyung haciendo que el mencionado tan solo sonriera, esa sonrisa haría derretir a cualquiera ya que era tan perfecta como para ser verdad.

T: Jimin tocó la puerta varias veces pero ustedes seguramente estaban gimiendo tan fuerte que no escuchaban.

J: No seas celoso Taemin, solo estamos rellenando algunos papeles.

T: ¿Se necesita semen como tinta para rellenarlos?

Jungkook estuvo apunto de decir algo pero fue interpuso por las pequeñas carcajadas que soltaba Jimin por la situación, los tres debían aguantar sus ganas de morir por la ternura o asustarían al menor de todos.

—Jimin, a qué viniste.

—Oh, Hyung. Un chico a preguntado por usted. Doña Juanita venía a informarselo a usted pero dijo algo sobre que se le estaba quemando el arroz así que me ofrecí para venir a decírselo yo.

J: a veces me pregunto si Jimin no será realmente un robot radioactivo que nos matara a todos en cualquier momento.

T: ¿Por qué lo dices?

J: Por la manera en la que se expresa, es tan natural y también por qué aprendió un millón de sílabas en solo dos semanas, cuando llegó a esta casa no sabía que era un pene.

Taehyung y Taemin solo carcagearon un poco por lo dicho mientras tanto Jimin solo inflaba las mejillas sonrojandose por la última palabra.

T: Es un gatito especial.

—Atrevete a decirle "gatito" de nuevo y te meteré la colección de mis navajas suizas por el ano.

T: Que miedo. /Muere de impotencia.

—A todo esto, Jimin. ¿Sabes el nombre de la persona que me viene a buscar?

—Doña Juanita me lo dijo y parecía preocupada por eso, creo que era..

La puerta abrirse sin tocar no era buena espina para ninguno, Jimin fue interrumpido por un chico de la misma estatura que Taehyung y la piel aún más pálida que la suya, era muy guapo incluso por esa cicatriz en su ojo.

¿?: Nos volvemos a ver, Kim Taehyung.