𝙈𝙞𝙣 𝙔𝙤𝙤𝙣𝙂𝙞 ; yoonmin

𝙈𝙞𝙣 𝙔𝙤𝙤𝙣𝙂𝙞

Abrió sus ojos para darle la bienvenida a un nuevo día. Somnoliento, giró sobre sí para encontrarse con el cálido cuerpo junto al suyo. Sonrió al ver su pálida espalda desnuda infestada de lunares, pasó su dedo sobre ellos en un delicado toque, como si no se los supiera de memoria.

—Buenos días, Minnie—su voz ronca le causó cosquillas en el estómago y pintó una hermosa sonrisa en su rostro.

—Buenos días, Yoonie. Hay que levantarnos—depositó un beso en su cuello y se levantó.

Salió de la cama y se aseó un poco antes de abrir la puerta y encontrarse con su lindo perrito.

—Buenos días a ti también, Holly—el can le ladró en respuesta y saltó emocionado al ver a su dueño despierto. —Estás hambrienta, ¿eh?—se encaminó a la cocina seguido por su mascota.

Una vez el sueño se desvaneció por completo se levantó para empezar su día. Se dirigió hacia donde estaba su novio guiado por los tarareos y cantos del mismo. Se sentía feliz y pleno cada vez que escuchaba su voz o sentía su presencia. Escuchó unas pisaditas rápidas dirigirse hacia él y con una sonrisa saludó al perrito.

—¿Al fin despertaste?—escuchó la voz burlona del menor y se aproximó a él.

—Lo dices como si hubiesen pasado años—lo abrazó por la espalda y comenzó a repartir besos por todo su cuello causando risitas en el contrario.

—Detente, o esto se va a quemar—escuchó un gruñido y con una sonrisa se giró para darle un beso.—Recuerda que hoy tienes presentación con los chicos, y conociéndolos ensayarán mil horas antes de la hora.

—Se le llama precaución. Quisiera no tener nada que hacer hoy y quedarme contigo todo el día.—puso la mesa para ambos con movimientos lentos y flojos.

Como había dicho el menor, una vez que terminaron de desayunar y hacerse cargo de la limpieza, JiMin llevó al mayor al lugar donde se encontraría con los demás para ensayar para su presentación de esa noche.

—¿Te veo esta noche?—le dijo el mayor asomándose por la ventanilla del auto.

—Por supuesto, después de todo soy tu fan número uno—intercambiaron sonrisas y un par de besos antes de escuchar a los demás llamar por YoonGi.

🎸

Si JiMin se arrepentía de algo era de aceptar la cita del estúpido de Min YoonGi, es decir, ni siquiera se conocían, apenas compartían un par de clases y el chico sólo se acercó con una sonrisa digna de un coqueto para después decirle "Te veo hoy en el sótano de los Kim, es una cita, dulzura".

¿Por qué, Park JiMin? ¿Por qué tienes que ponerte a ti mismo en estas situaciones sólo por chicos lindos?

—¡Hey! Chico lindo, por aquí—volteó aunque no estaba seguro si lo llamaban a él.—Soy Kim TaeHyung, te ves algo perdido.

El extraño de sonrisa amable comenzó a guiarlo por el recinto que estaba abarrotado de gente, rodeado de sustancias extrañas y gente que nunca había visto en su vida. Intentó aferrarse al chico que se le acercó y no perderlo de vista, pero era difícil con tantas personas.

—¿Es tu primera vez aquí?—le escuchó preguntarle sobre la música que sonaba por todo el lugar. Asintió como respuesta.—Entonces sí eres tú, vamos—le sonrió otra vez y lo arrastró hasta el inicio del escenario improvisado que habían montado.—Esta noche hay una "batalla de bandas", es más bien como reclamar territorio, es extraño pero así funcionan ellos.