Papi ﹙Kim Taehyung﹚

PAPI - último

Epílogo

Fue casi un mes y medio divirtiéndonos de todas las maneras posibles en nuestra luna de miel el año pasado. Hoy exactamente era nuestro aniversario.

Nos mudamos. Taehyung, mientras estábamos allá contrató a personas de confianza para que amueblaran la nueva casa. Vivimos en una zona más tranquila, compramos una casa en París y podríamos ir las veces que pudiéramos y quisiéramos.

Recuerdo que Yugyeom me llamó emocionado contándome la noticia que se casaría con Namjoon, si no fuese por eso Taehyung hubiese pretendido quedarse por más tiempo en la luna de miel aunque él mismo lo niegue.

Estaba feliz por mi amigo, sé que Namjoon es buen chico para él. La boda fue por civil, estaban algunos invitados por parte de Nam y de Yugy aparte de Devon, Jimin, Tae y yo.

-Voy a lanzar mi ramo, me vale mierda todo y no me importa si no es por iglesia. -vociferó Yugyeom cuando salimos al aire libre, se puso de espaldas y lanzó el ramo de flores cayendo en manos de nada más y nada menos que Jimin.

-Se suponía que lo agarraría yo, amor. -se quejó Devon- Yo tendría que agarrarlo.

-Quien sea de los dos lo haya agarrado no impide que... -se arrodilló frente a ella sacando una cajita la cual abrió- ¿Quieres casart-

-¡Claro que sí, Park Jimin! -gritó ella interrumpiéndolo con voz entrecortada.

Todos los presentes aplaudimos. Fuimos hacia ellos a abrazarlos y darles nuestras felicidades. Fuimos a celebrar a casa de Namjoon y Yugyeom, sí, también se mudaron a una casa que alquiló Namjoon. Aún no saben si quedarse en Corea o ir a otro país o hasta la misma París.

Taehyung y yo regresamos en la noche a nuestra casa. Fuimos a cenar y ver una película de estreno en el cine por nuestro aniversario

-Cielo... -se apegó a mi dándome a entender lo que ocurría- Perdóname, ¿También quieres?

Lo miré a los ojos sonriendo,- Supongo que luego de ver algo creo que no querrás que lo hagamos.

Me miró con su celo fruncido.

-¿A que te refieres _______?

Fui a buscar los papeles y la prueba de embarazo. Volví y se los entregué, este se quedó viéndolo por un rato, en lo que veía los papeles me miraba a mi de reojo.

-¿Taehyung?

No reaccionaba y me estaba asustando.

-Hey, te quedaste en pausa. -reí bromeando pero aún así no se inmutaba.

-Cariño -comenzó a hablar con voz algo baja por lo que tuvo que aclarar su garganta- En serio no sabes lo feliz que me encuentro pero..., ¿Estarías dispuesta a tener 3 más si es posible?

Abrí mi boca y ojos atónita causándole gracia.

-Claro, como no eres el que dará a luz.

-Lo sé, entiendo tu punto verídico pero en serio, la idea de una familia contigo la llevo hace mucho tiempo en mi mente.

Un ligero pero notable brillo apareció en sus ojos, creo que estaba a punto de llorar, yo no era la excepción.

Devon y Yugy me acompañaron a la clínica el fin de semana pasado para saber el sexo de los bebés, resultaron ser gemelos, un niño y una niña.

Mis amigos me ayudaron con dos baldes de pintura color azul y rosado para cuando llegara el día, pintaríamos dos lienzos, uno de cada color.

Y así hice, los cubrí con una tela que no transparente mucho ni se vean los colores.

-Amor, ven. -lo llamé, éste llegó como un rayo.

-¿Que pasa? ¿Estás bien?

-Te quería mostrar algo y para eso tienes que quitar la tela.

Me vió y se acercó curioso a los caballetes con ambos lienzos. Al quitarlos se quedó viendo sin entender.

-¿Y qué tiene esto? No comprendo.

-Tú piensas el nombre de nuestra hija y yo el de nuestro hijo. -comenté abrazándolo.

Él entendió cambiando su cara a una mezcla de sorpresa y felicidad.

-¡Soy tan feliz! -repartió mil besos por mi cara.

Por la noche antes de dormir Tae se acercaba a mi vientre al cual aún falta por crecer, y le hablaba a nuestros bebés sin falta. Siempre me preguntaba si algún nombre que tenía pensado me parecía bonito o no.

Poco a poco compramos más cosas de bebés y decoramos su cuarto muy bonito.

No podía esperar a que nacieran y tenerlos en mis brazos, amarlos siempre y verlos crecer junto a sus demás hermanos, exactamente Taehyung quiere 5 y lo peor del caso es que me convenció en que así será.

-¿Tienes idea de lo mucho que te amo, _______?

-Yo también te amo, Papi.

Él carcajeó,- Por Dios no me recuerdes eso.

-¿Por qué no? Al final conseguiste que yo te llamara así, lo tenías todo y lo dabas todo por un tonto apodo.

-Podría tener absolutamente todo, escucha bien, todo en el mundo pero no me será suficiente si no te tengo a ti porque eres simplemente mi felicidad y mi linda casualidad, _______, eres mi vida desde que te conocí.

Me lancé a él abrazándolo fuertemente y besándolo profundamente.

Fin.