Idiota....no me conoces.

Me estoy cagando

Estábamos subiendo para lo más alto, hasta que se paró en el mismo tope. Mierda.

-que demonios fue eso?- pregunto Matthew gritando.

-te puedes calmar solamente se paró nada del otro mundo- le dije tranquila pero por dentro me estaba muriendo.

-ohhhh ahora no te hagas la chica fuerte porque sabemos que nos estamos cagando por dentro- dijo algo molesto.

-te puedes callar me estas poniendo más nerviosa- le grite

-como coños quieres que te hable sí estamos a una altura demasiada alta y estamos parados- me grito. - y sí se dañó?- dijo nervioso.

-se paró solamente es algo del juego-

-eso quisiera yo-

-ashhh no me hagas partirte la cara aquí- le dije nerviosa.

-no tendrás las agallas ni siquiera para mover un pelo aquí arriba- me dijo.

-Olle me estas lastimando- le dije al sentir su mano que me estaba apretando.

- lo siento Azul pero tengo miedo y créeme que nunca e dicho esas mierdas al frente de una chica- me dijo.

-me gustaría decir lo mismo, pero no diría eso al frente tuyo- le dije soltándome de su mano.

-estaría encantado de escuchar esas palabrrrrrr..........- paró de repente cuando empezó a bajar la máquina.

Me volvió a agarrar de la mano pero más fuerte, "creía como sí me fuera a ir volando".

Empezamos a gritar como sí el mundo se estuviera acabando.

*********

-eso estuvo genial- dije saltando como loca.

El juego estuvo increíble me había divertido demasiado y más si Matthew se hubiera declarado diciendo que tenía miedo.

Me pare en seco cuando vi a Matthew estaba tremendamente pálido. ( y cuando digo tremendamente es como sí fuera un muerto con vida).

-Matthew estas bien?- le pregunte.

Susurro algo pero no lo escuche.

-que dijiste?- le volví a preguntar.

-no me siento bien- me dijo -quiero vomitar.-

-Azul quiero vomitar- dijo más alto meciendose como sí se iba a desmayar.

-vamos- le dije.

Lo cogí del brazo y empezamos a correr, me dirigí a los baños pero había una fila enorme, me voltee para ver a Matthew y tenía sus labios sumamente blancos.

"Azul va a estallar" dijo mi voz.

Lo volví a coger del brazo y empezamos a correr de nuevo, para llevarlo a la grama.

Cuando llegamos se quedo un tiempo mirándome a los ojos como si estuviera pensando lo que iba hacer, y exploto.

Le agarré la frente y recogí un poco su cabello de la frente, y volvió a vomitar.

Pasaron 5 minutos.

-ya estoy mejor- dije algo cabreado.

-ya era hora tienes como 5 minutos vomitando- le dije algo cansada.

-no le digas a nadie lo que pasó por favor- me rogó.

-enserio no quieres que le diga que casi te cagabas en el Holk, me agarraste de la mano por el miedo y vomitaste, esto se merece una portada en el periódico- le dije para después reírme.