Desde que entré ese lugar, el mundo exterior me parce un sueño.
A decir verdad en el orfanato estába muy feliz, sin una familia, sin un árbol de navidad y sin esas cosas con las que son felices los demás, ahí adentro contaba historias a los niños de como imaginaba la navidad desde afuera,
Mis compañeros y yo todos teníamos algo en común, ser huérfanos.Eddy mi buen amigo de 12 años, soñaba con tener un regalo; muy apesar que era muy alegre distaba de tener una incapacidad pues era un niño quemado.
Ronaldo era mi buen amigo de 15 años; él tenía una enfermedad muy rara su piel parecía de pescado.
Eran buenos chicos, todos recordaban los traumas de una niñez muy dura, recuerdo como les hablaba del exterior, en especial de la navidad.
Mi madre me hablaba de eso antes que me abandonara aquí, a diferencia de ellos yo tenía una familia que me había abandonado y eso me hacía sentir parte de ellos, solo por mi forma deforme como decía mi madre.Cierta tarde entre risas y platicas hice un plan.
—¡Eddy amigo!, he estado planeando ir en búsqueda de algunos regalos para ustedes, tengo planeado saltar el muro al anochecer, estamos a 2 días de la navidad ¿que te parece?.–Le dije con alegría.
—¡Rayos Timmy! ¿Como le harás ? ¡Con un solo brazo y sin un solo ojo!¿Crees poder?.–Me dijo mi amigo algo asombrado, quizá dudaba de mi capacidad.
—¡Si!, Ya verás que cueste lo que cueste les traeré regalos a ustedes.–Le dije dándole un abrazo.
—¡Confio en tus buenas palabras!, pero no digas ni una palabra a Ronaldo le haremos una sorpresa para cuando llegues con los regalos Timmy.–Me dijo expresando una alegría por fuera pero se que por dentro de él, el miedo lo mantenía cautivo.
Esa misma noche salí en búsqueda de la aventura, como pude con una soga la até a un extremo de la barda y con mi solo brazo tome todo el impulso apoyado de mis piernas, era una barda de 2 metros y con un solo brazo se me dificulto escalarla, sentía que mi único ojo saldría de su órbita pero la alegría de mis amigos me dió la fortaleza.
Logré saltar pero caí un poco mal y empecé a cojear para colmo, pero no habría dolor que me detenga yo sé que todos debemos ser felices de cierta manera.
El orfanato estába a 3 km en las afueras de la cuidad, algo que en caballo o en automóvil es una distancia corta, pero a pie es una eternidad.
Mi ropa era muy vieja de color café y casi no había agua en el orfanato y en verdad mi aspecto no era de un niño que a mis 12 años luciera como tal, mis manos estaban negras de tanto hollín, pues el carbón era del día a día, la cicatriz en mi ojo y en el brazo no me hacían parecer amable ¿ cómo le iba a hacer para pedir regalos a los citadinos?
¡Rayos y centellas! En buen lío todo por andar haciendo el papel de papá Noel.
Había mucho frío y paso a paso firme con la idea de hacer felices a mis amigos, para mí suerte no estaba nevando solo era una corriente de aire frío, mis pies ya me empezaban a doler,mis viejas sandalias sus suelas tocaban el frío de la carretera, pero entre mis lamentos llegué a la Cuidad de Quezantla, según decía el letrero navideño a la entrada de la cuidad.
Es tan hermosa como la recordaba, habían tiendas con adornos, en la calle había muchas personas con sus bufandas una que otra se tapaba la nariz al verme, con cara de asco y unas miradas repulsivas me acompañan a lo largo del viaje.
En una tienda de jamón ahumado me acerque:
—¡Buen día!, disculpe vengo del orfanato, que está a las afueras de la cuidad, quisiera que me regalará algunas piezas de jamón, no importa si son las sobras, son para mis amigos.–Dije desde la puerta.
ESTÁS LEYENDO
Postmortem Diary One-Shot
Mystery / ThrillerHistorias dónde reina el dolor, la muerte y la miseria. No hay felicidad en el mundo sin haber sufrido para alcanzarla, pues ella es efímera que solo en un paso hace sentir al corazón lleno de vida y cuando se marcha es vacía de nuevo. 🌸🌷🌟 🌟🌟Ga...