𓏲࣪ 𝘊𝘩𝘳𝘪𝘴𝘵𝘮𝘢𝘴 𝘉𝘶𝘵𝘵𝘦𝘳𝘧𝘭𝘪𝘦𝘴「🖇️」

primera razón (2/2)

Han, Jun, Seok y Soon le dijeron que él menor no había ido a su junta. Estaban los 6 preocupados. Solo que los otros 5 no sabían como acercarse. Derrepente un día Shua se cerró, y se veía incómodo entre ellos, no querían ver mal a su amigo por decir algo incorrecto. Solo SeungCheol podía calmarlo.

Fue corriendo a la casa del menor, en su camino, compró dos sachets de chocolata y pasó por una panadería para comprar facturas. No podía permitirse tardar demasiado. No quería llevarse una fea sorpresa.

Los últimos días se habían basado en salir de la Uni, y correr a la casa de Joshua, no se iba a perdonar si le pasaba algo. Sería su culpa por no llegar a tiempo. Tal vez también por no admitir que amaba a Joshua. Jeonghan le había pegado repetidas veces por eso. Le decía que aunque también se preocupaba por mucho por Joshua, su amigo de toda la vida, si se iba no iba a ser la culpa de nadie y no podía presionarse tanto, le haría mal. Pero no lo escuchaba, tenía que ayudar a Joshua. Él no importaba.

Cuando llegó, tomo aire y tocó la puerta. Estaba nervioso. Demasiado. La ansiedad era fuerte. Uno, dos, tres. No abría. Cuatro, cinco, seis ¿Llegó tarde? Siete, ocho, nueve. Se aguantó las lágrimas y las ganas de tirar la puerta. Diez, once, doce. Abrió. Él menor estaba vivo, estaba bien, seguía con él.

— Hola Shushua~. Ví... que en los últimos días, no comiste bien, así que decidí que íbamos a merendar juntos y no voy a aceptar un no como respuesta. Traje vigilantes* con membrillo y crema pastelera, y sacramentos* con jamón y queso. También chocolatada, sé que te gusta mucho– Se dió cuenta que estaba hablando de más y miró hacia otro lado, avergonzado. Tragó y le hizo una seña para que lo dejara pasar, el menor le agradeció se corrió.

Fue directo a la cocina y puso todo sobre la mesada. Luego sacó de la alacena dos vasos y un porta sachet. Básicamente preparó todo, mientras él americano lo observaba desde el marco de la puerta.

— Ya está, sentate en el desayunador.

— Bien... Gracias Cheol, pero no hacia falta– Se sentó en una silla, se veía culpable. Pero no había hecho nada malo, era un sol.

— No digas eso, come que está re caro– El contrario rió leve tapándose la boca asintiendo. Es que era verdad, se había ido todo a la mierda.

— Está bien, está bien.

Luego de merendar, estaban por ver una película. Pero a Seungcheol se le dió por comprobar su vaga teoría. Tomó con cuidado el brazo del menor, como si fuera de crital. Y vió sus heridas. Ambos sabían que no había sido un gato o algo parecido. Estaba preocupado, quería gritar, llorar y abrazar al menor con fuerza. Pero, no, no podía actuar impulsivo, podría lastimarlo. Así que acercó su cara a los cortes, y besó todos los que habían cicatrizado.

— Son preciosas. Pero tu piel es muy bonita para que la lastimes, podemos dibujarle mariposas, tenés cara de wawa y te quedarán bien– Le sonrió, mientras se paraba y se dirigía al escritorio, tomando un fibron indeleble. Vió cómo el menor lo miraba extrañado.

- Cheollie, no importa...

- Si importa, eres mi- quería decir novio, amante, amado, pero no, el menor solo era–... mi mejor amigo...- Dudó bastante. No quería ir muy de golpe y sofocarlo, pero terminó por hablar- Yo... Shua... ¿En serio crees que no me dí cuenta de tus intentos?

- ¿Qué? ¿Intentos de qué?– Suspiró para sus adentros.

- Joshua... Estoy casi seguro de que si entro al baño voy a encontrar pastillas y/o una soga- Hablaba serio, pero intentaba regular su tono para evitar lastimarlo. Su deber era hacerlo feliz, no hacerlo llorar.

- Cheol– El menor estaba triste, estaba demasiado lastimado, y él iba a curarlo- Perdón, pero mi vida no tiene sentido, todo lo que hago, todo lo que siento y/o pienso lastima al resto. Y si no llegó a lastimarlo se aburre de mi y me desecha como basura. Soy un egoísta de mierda. No merezco vivir.

Suspiró nuevamente, pero esta vez si se escuchó- No puedo obligarte a vivir, pero... Al menos dame una oportunidad...– «Sé mi novio»

- ¿Oportunidad?- El menor se veía ilusionado.

Todo el valor que tenía se fue a la mierda, el miedo de arruinar su amistad lo invadió - Seis días para navidad. Seis razones para que sigas tu vida- No sabía de donde se le ocurrió, pero también servía.

El menor se veía decepcionado. Mierda, mierda, mierda. Lo termino besando. Sus labios sabían a vainilla. Era hermoso. Pero necesitaba aire, así que cortó el beso.

- Dios, no sabés cuánto he esperado para probar tus labios...– Exactamente un año– Te amo Joshua y no pienso perderte– Se perdería él primero.

- Yo... yo también.

- Primera razón- Acarició su mejilla, sonriendo, iba a ayudarlo, le guste o no- Te merecés una nueva oportunidad. Todos cometemos errores, somos humanos, y es normal. No sos una basura mientras aceptes tus errores- Lo besó nuevamente.

- Nunca acepté tu propuesta.

- Supuse que cuando correspondiste mi beso fue un acepto.

Dió una pequeña sonrisa- Bien.

Luego tuvo que irse, al día siguiente si se quedaría, pero tenía que avisarle a su primo.

Lloró toda la noche con el miedo a que al menor le de un ataque y lo pierda.

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*eso es un vigilante, ah—

** y eso un sacramento con j&q.