- Que pasaría si todo lo que conocemos hasta ahora sobre el universo fuese una mentira, y si el universo esconde un oscuro secreto que pone en riesgo a toda aquella vida humana...
Isabelle Jones una chica independiente, fanática de la lectura y el u...
Cada vez sentía más el dolor en mis piernas, pero el pavor en mi cabeza me impedía detenerme. Mis párpados temblaban, mis ojos comenzaban a cristalizarse y mi cuerpo amenazaba que en cualquier instante se desplomaría en el suelo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Todo comenzó aquel 25 de agosto. Ese día tenía turno de noche.- Trabajo como limpiadora en el centro de vuelo espacial de Goddard. Requerí de unos 30 minutos para llegar, me dirigí a colocarme mi uniforme y más tarde me lo acomodé, cogí el carrito con el material de limpieza necesario y comencé a realizar mi trabajo. Ya había terminado de limpiar una de las puertas y al dar un paso hacia atrás, me choqué con lo que parecía ser una persona, aunque, al principio no tuve bastante tiempo de considerar quien era, ya que, había perdido el equilibrio, pero antes de que simplemente me pudiera caer, sentí como una mano me sujetaba del brazo, entonces, tome conciencia y giré mi cabeza para identificar quien era. Empecé mirando de abajo a arriba la gran silueta que me agarraba, hasta que alcance su semblante, pero toda mi atención fue llevada a sus ojos color grisáceo.
~Mark Lewis~
Cuando la chica mantuvo contacto con mis ojos sentí como una ráfaga de calor recorría todo mi cuerpo, pero lo que llamo más mi atención fueron sus ojos que me atraían, eran oscuros, parecían un pozo que al final de su recorrido escondían un gran tesoro, era algo extraño. La levante rápidamente y la miré con firmeza pero esbocé una leve y rápida sonrisa. La chica se estaba sonrojando. - Ten más cuidado la próxima vez -dije mirándola fijamente-
~Isabelle Jones~
- Ten más cuidado la proxima vez -dijo el chico mientras me miraba fijamente cambiando su rostro a uno que no transmitía emociones- Sentí mis mejillas ardiendo de la vergüenza, pero no bajé mi cabeza y simplemente le respondí con una leve disculpa. Sin esperar a que me dijera algo, salí corriendo del pasillo. Al principio seguía agitada por el encuentro con el chico de ojos grises, pero fui relajándome poco a poco. Cuando regresé a la realidad me di cuenta que había llegado a una zona que desconocía, en la cual tenía dos opciones retroceder o continuar recto hasta el fondo del pasillo en donde se hallaba una puerta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al principio quería retroceder pero una fuerza me atraía a aquella puerta e inconscientemente comencé a caminar a ella. Entonces extendí mi brazo y giré lentamente el pomo mientras que en mi cabeza un extraño pensamiento apareció: "Cuando atraviese esta puerta mi vida tendrá una nueva etapa"
