Una tarde normal y cualquiera se encontraba en Flame Underworld, con el pueblo todo tranquilo y melancólico, era una costumbre que este tipo de ambientes este todo los días en este mundo de fuego, antes de que decidieran invadir al otro mundo, aun había algo de alegría, aun había personas bailando, cantando y tocando música, antes las calles no parecían pueblos fantasmas, si no que siempre había un grupo bailando en cada esquina diferentes tipos de instrumentos que tocaban diferentes tipos de música para las personas, algunas canciones eran para conmemorar a familiares que perdieron en la caída de La Tierra del Sol.
Lo que los otros mundos ignoraban eran que este mundo de llamas tiene un origen muy trágico y triste, a las afueras de esta zona de los pobladores, muy lejos que puede ser hasta un día de viaje, se encontraba un monumento, no uno cualquiera, era uno muy importante para esta gente y para ella misma, en ella estaba escrito los nombres de padres, madres, hermanos, compañeros, amigos, amantes e hijos incluso familias enteras, tanto demonios como ángeles, que sufrieron la injusticia de Siralos.
Aunque no pareciera, en casi la mitad de la población tiene sangre de ángeles que andan por sus venas, la mayoría de ellos son de clase mestiza, pero no los odiaba, ellos no odiaban a los ángeles, ellos desconfiaban de los ángeles, ella misma tiene un hermano ángel pero no lo podía odiar.
La idea de este monumento fue que muchos demonios que los echaron a este lugar no sobrevivieron a la caída, algunos incluso se sacrificaron para sus personas queridas vivieran, supo de muchos casos en donde los padres se sacrificaban para proteger a sus hijos, era algo demasiado triste, aun cuando se supone que se estaban levantado y tratando de ser más fuertes, en cada ciudadano se prendió las llamas de la venganza, ella de verdad no quería hacer nada malo, no quería ser como Siralos, se prometió no ser como Siralos, ella no mataría a gente inocente que no tenían nada que ver en la situación.
Pero incluso ella no pudo evitar que esa llama se encendiera en su corazón, no cuando su amiga murió en sus propios brazos, ella tenia la capacidad de sanar heridas, no importa que tan mortal era ella podía sanarlo con su poder, pero cuando Siralos le arrebato sus alas, su poder de curación bajo considerablemente, aun puede curar heridas, pero ya no era como antes, así que cuando trato de sanarla no pudo hacerlo y tuvo que hacer una promesa para cuidar la hija de su camarada caído, ella trato de convencerse que murió por el parto, pero ella sabia en el fondo de corazón que fueron por las heridas que hizo Siralos, cualquiera que sobreviva a esas heridas era sin duda alguna un verdadero milagro, un milagro que su amiga no pudo tener.
Pero aun mantiene su promesa de cuidar a su hija y protegerla, sin duda no la a roto, siempre la mantenía alejada de ese Diablo pervertido y desgraciado de ojos morados y ante cualquier peligro ella va a rescatarla aunque parezca siempre arisca , sabia que ella y Adauchi se veían a escondidas, pero se hacia la ignorante, porque ellos desde bebés habían siempre estados juntos, sin duda alguna Emalf había sacado la belleza que tenia su madre con su habilidad del cuchillo, pero los ojos y personalidad sin error alguno lo saco de su padre, aunque trate de ocultarlo detrás de esos lentes oscuros.
No pudo evitar soltar una risa al recordar al padre de Emalf, sin duda alguna ese demonio claro también fue un camarada suyo, pero murió antes que su mujer, fue un buen hombre, algo tímido y cobarde pero siempre dando su opinión y con su habilidad que los salvo muchas veces de casi morir.
No pudo evitar soltar una risa al recordar esos buenos momentos que paso con sus amigos y hermanos, y su sonrisa desapareció al recordar como fue que perdieron a Rieta, la mujer de grandes garras fue el único ser en abandonar voluntariamente La Tierra Del Sol, sin duda alguna algo valiente y con gran fuerza de voluntad para hacerlo y solo lo hizo por ella, por su capitana, Rieta era la única de sus camaradas que le quedaba (sin contar a su hermano), después de los eventos en el jardín, busco a Rieta con Emalf y su hija, busco por cielo y tierra, y con algo de magia de libros que tenia guardado abrió portales sencillos y fáciles de hacer para buscarla.

ESTÁS LEYENDO
Nada Es Como Parece Ser
Hayran KurguQue pasaría si te dijera que............................. La personas en tu más confiabas, te traicionara y te botara como un simple trapo sucio, que a pesar de todos los momentos que pasaron juntos, que descubrieras la verdad y tu buscabas justicia...