Capítulo 9: Nada sale bien
- Carolina, ¿me puedes explicar qué está pasando? - me preguntó Hugo mientras corríamos hacia la moto.
Habíamos comido a toda velocidad para poder llegar a la plaza lo más rápido posible. Todavía no le había explicado qué sucedía. No disponía de tiempo suficiente, se lo contaría cuando llegásemos a mi casa.
- Hugo, ahora mismo no puedo contártelo, es una historia muy larga. - dije arrancando la moto. - Corre, súbete, tenemos que ir a mi casa primero. Ahora te cuento.
Él estaba preocupado, pero no volvió a hablar durante el viaje. Mi casa no pillaba muy lejos, pero iba con la hora justa. Las 15:40, veinte minutos para llegar a mi casa, cambiarme, e irnos al sitio donde había quedado con la extraña persona que me había llamado.
- Hugo, sube conmigo a mi cuarto y te voy contando. Solo tenemos quince minutos para llegar a la plaza España. - dije abriendo la puerta de casa.
- ¿La plaza España? - dijo extrañado. - Carolina, ¿qué pasa? No entiendo a qué viene todo esto.
- Sube, ahora te cuento que me tengo que cambiar.
Fui a mi cuarto, con Hugo detrás mía. Rebusqué entre los cajones mientras le contaba la llamada que había tenido por la noche. Cogí la camiseta roja, me la puse y me coloqué las gafas de sol. Hugo no daba crédito a lo que estaba pasando.
- ¿Y vas a ir para ver a un tipo que no sabes ni quién es? - dijo levantando la voz. - Carolina, no sabes que quiere ese tío. Podría hacerte cualquier cosa.
- No digas que es un chico puesto que no lo sé. No distinguí bien la voz cuando me hablaba. Y sí, voy a ir. No me va a pasar nada Hugo, puesto que vas a venir conmigo.
Me dispuse a bajar las escaleras, pero él seguía sentado en la cama.
- Hugo, venga, que voy a llegar tarde. - dije metiéndole bulla. Pero no se movía.
- No voy a ir a ninguna parte, y tú menos. ¿No te das cuenta? A saber qué quiere esa persona. Podría hacerte daño Carolina, ¿no lo entiendes?
- Así que era eso... otra vez la misma historia. Hugo no me va a pasar nada. No puedes vivir siempre pensando que me va a pasar algo. No voy a desaparecer de tu vida como pasó con Lucía. Al menos, no de ese modo.
- ¿Cómo estás tan segura? ¿Y si es un tipo que pretende hacerte cualquier cosa? ¿Algún psicópata que haya dado contigo por alguna razón solo para hacerte daño? - dijo él, a punto de derramar una lágrima. Pero no lo hizo, era demasiado testarudo como para derramar una lágrima por aquello, aunque el motivo fuese yo.
- ¿Y si no es así? Hugo no lo sabes, y yo tampoco, pero si no voy nunca lo averiguaré. - dije sentándome a su lado e intentando tranquilizarlo. - Ahora, escúchame. Me voy a sentar en el banco, tal y como me dijo la persona por teléfono, y tú te vas a sentar en otro cercano a mí. Si ocurre algo extraño, llama a la policía.
- ¿Y si decide hablar contigo dando una vuelta? O... ¿y sí entre la multitud te pierdo de vista?
- Si vamos a dar una vuelta, síguenos, pero sin que se dé cuenta. Y si me pierdes de vista... llama a la policía también. - estaba ya más tranquilo. - Todo tiene remedio en esta vida menos la muerte.
Aquello creo que le dolió, pero esa era mi intención. Siempre estaba pensando que me iba a pasar algo, que siempre que comenzase a cogerle cariño a alguien, desaparecería de su vida. Y no podía seguir viviendo así. Era cierto que todo aquello era un poco extraño y seguramente peligroso, pero a lo mejor no. Había muchas posibilidades, pero él siempre escogía la peor.
ESTÁS LEYENDO
Todo empezó antes de lo que pensabas...
RomancePues sí, comienza el verano. La mayor aventura que le puede deparar a cualquiera. Vacaciones, playa, piscina, amigos, nuevos amigos... y amores veraniegos. Cuando comienzan las clases, todos hablan del chico tan guapo con el que han compartido el ve...