Creo así que el origen no es sólo uno. El origen empieza, termina y vuelve a empezar en cada uno de nosotros.
No hay que temerle a las preguntas sin respuestas. No hay que temerle a las preguntas ya respondidas y tampoco a las nuevas preguntas que esperan con ansias ser contestadas.
Empieza a sentir miedo cuando dejes de producirlas. Seguro de algo te estarás perdiendo, de algo te estarás escondiendo y ese algo puede ser gigante, tal vez más gigante que tus sueños actuales.
No te vuelvas pequeño y silencioso. Habla y fuerte. Pregunta y pon en duda. Sé el origen de preguntas nuevas y busca la manera de responderlas, aunque algunas te tomen la vida.. estarás siendo el origen de algo posiblemente grande y eso realmente vale.
ESTÁS LEYENDO
Fragmentos de mi misma.
PoesíaMe hallaba dispersa, dividida en varias partes por innumerables universos, pero al momento de escribir he logrado la unión de todas esas partes en perfecta sintonía, sin poder arrebatar el sistema no gravitatorio en el que me encuentro, por lo tanto...