Entre Bestias
El pelaje del perro gigante era gris; tan gris como las nubes en plena tormenta. Sus ojos eran del mismo color intenso, pero con un leve dorado alrededor de ellos. Impresionante, todo en él lo era. Era tan irreal, que estaba seguro que nadie me creería si se los dijera. Jamás vi a un lobo tan grande. Y eso no era lo...