Humo, cigarrillos y un alma rota.
Odio tanto las despedidas... Espero que no sufras como yo sufrí por ti, porque me vería obligada a despertar de ese sueño profundo al que siempre deseé estar. No intentes detenerme al leer esta carta, no te decepciones si llegas tarde, creéme, estaré mejor en otro mundo. Esto es lo indicado para mi, no soporto más est...