Era un otoño como cualquiera para la Mayoría, pero no para Isabel; La joven ya no tan joven de 29 años, ¿Pero porque éste era un otoño diferente para ella? pues la razón es muy sencilla, era la primera vez que Isabel experimentaba lo que significa amar y no ser amado, lo que la mayoría vivimos en nuestra adolecencia, aunque de una manera más inmadura y pasajera pero al fin es igual. Se acercaba su cumpleaños 30 y lo único que Isabel sabía de amor era que el primer que logró tener su confianza la traicionó.