"Pastillas y hierbas" es el único mundo que Darcy conoce. Puede que no el mejor, pero sí el que ella necesita y ansía. Su mundo seguiría girando alrededor de esas dos palabras, si por accidente no se hubiera involucrado con el chico cuya reputación se encuentra en números rojos. Aster es el ser más asociable, frío, calculador y ególatra que ha pisado alguna vez el instituto más prestigioso de todo el condado. O eso dicen los rumores.