Él tiene una vida tranquila y agradable que no podría arrepentirse de nada si le llegaba su hora de morir algún día. El otro es un callejero sin algún lugar al cual llamar hogar, metiéndose en problemas constantemente y tratando de sobrevivir al cruel destino que le tocó. Cuando esos dos seres se encuentran pueden percibir una conexión única, nueva y confusa para ambos, pero agradable a la vez. Justo cuando el callejero siente que no quiere ir a otro lado que no sea con él, viene alguien más problemático que los pretendientes del pelinegro para estropear su lugar favorito. Y por si fuera poco, los problemas de su pasado también lo asechan en su presente. • La imagen en la portada lo hice a mi estilo con base de internet porque era de a rápido.