Demonios, hombres. Hombres, demonios. En esta historia se destaca la dualidad de dos pueblos, diferentes entre si, pero iguales en cuanto a su búsqueda por la supervivencia. Desde los ojos de ambos bandos se descubren perspectivas distintas que revelan sus motivaciónes, sus miedos y sus vidas. Entre gritos de guerra, estruendos de batalla y susurros de esperanza, esta breve narrativa enseña un mundo donde la línea entre el bien y el mal se desdibuja y donde la lucha por la victoria es solo el reflejo del conflicto interno de cada grupo por la supervivencia.