¡Hola! Me presento, soy Abby Barbrow. Dejé la carrera hace un año, cosa que a mis padres no les gustó nada, para seguir con mi pasión: el arte. Sí, sí... ya sé que es muy difícil ganarse la vida haciendo esto y que es muy difícil construirse una buena reputación, pero me pregunté... ¿y si sale bien? Resulta que me acabé convenciendo a mí misma de que era una buena idea haciéndome esa pregunta una y otra vez... y esa es, más o menos, la historia resumida de como acabé siendo la vecina del que yo no recordaba que era alguien que ya conocí una vez.