Hombres De Manhattan #2 ¿Quién diría que el destino de Alex Hardy, se encontraba en una isla del Atlántico? Pero lo descubrió de la manera más increíble, al meterse en los asuntos turbios de Diego Gómez, así que, cuando despierta en un remota y casi desierta isla en el medio de la nada, con una desconocida de aspecto angelical sobre él, mirándolo con extrema curiosidad. Poco tiempo después, supo que Abigail Ward era problemas en mayúsculas. Por supuesto, no se trataba de ningún ángel celestial ni nada por el estilo, sino del mismísimo demonio.