7: recuerdo también que entre lágrimas escuché algunos murmullos de la gente que salía de dicha tienda. no recuerdo más porque al segundo mi madre ya me jalaba suavemente del brazo y me ayudaba a caminar. me dijo que me había tardado mucho y creía que me había pasado algo. me preguntó que había ocurrido y le mentí con que había visto a varios perritos en la calle comiendo plástico pensando que era comida. y como siempre, mi madre me creyó.
6: ya ni pensar en la gente que me quería era suficiente, porque "aquello" rápidamente me hacía dudar de ellos y aquello instalaba la dolorosa idea de que quizás ya nada valía la pena, de que era un gran estorbo entre su familia e incluso el mundo mismo.