En realidad no tienes idea de lo que tus historias han hecho por mi,, sobre todo esta última que leí (Galletas de chocolate) estaba pasando por una crisis existencial (pese a mi edad) y no tenía ganas de nada pero he fantaseado, reído, llorado y demás con la historia. Gracias infinitas por tan grandes obras, por lo que con ellas creas y ayudas. Dios te bendiga siempre.