"Me encontraba sentada con una copa de vino a medio beber la angustia se apoderaba de mi mente, y qué pasaría si ya no me amaba, qué pasaría si me despreciaba, acaso debía esperar a que el me abrazara?, o simplemente correr a sus fuertes brazos y decir que lo amo, pero si él no me ama? Sería una gran pena, sería una estúpida. Tal vez debo dejar que él me abrace, que él me hable pero si él piensa lo igual qué debo yo hacer, acaso debo verlo a los ojos y descifrar su ser. Pero cómo hacerlo si al ver sus ojos cafés pierdo la noción del tiempo pierdo el sentido de la vida esos ojos que me incitan al beso, esos ojos que mueven mi ser, cómo verlos sin caer ante él, debo esperar, pero si no es el mismo del que me enamore? Qué debo hacer pedirle que se vaya? O acaso pedirle un último beso. ¡DIOS MIO QUÉ HARÉ!." - un universo de pensamientos fue la causa de su tristeza, Oscar Moreno -.