Hey, ¿cómo estás?
Por allá en el 2015, (creo que antes), leí casi todas tus historias.
Las ame en ese momento y lo sigo haciendo ahora.
Al pasar los años, vuelvo a releeelas y sigo impactada con la brutalidad de tus escritos.
¡Gracias por enseñarme un mundo repleto de palabras!