Sé que no era esa clase de tia que querías, que seguramente no soy la más tierna y dulce, ni la más atenta o interesante; y todo lo que más o menos sabíamos: toca cojones, algo fría, con ataques de sinceridad sin respuesta tuya a veces, nerviosa por nada y ansiosa por todo. Sí, ok, esa soy. Pero olvidaste algo, fui la que te bese con toda la timidez del mundo, esa que nunca aparento tener, te abrace con la ternura que nunca sale a la luz, te hablé en aquel momento de manos entrelazadas con una dulzura que no carezco; y a mi manera te di aquello que querías, entonces... ¿merecía ser una más?