Lázaro Orlando Céspedes Poveda

No tengo talento de poeta. Sólo sobrepienso mucho y de profundo me reviento 

Me siento tan triste, ya ni siquiera puedo terminar una estrofa 

Hace años venía diciendo que iba a dejar de escribir, lo sentía en mis entrañas cuando la rabia al escribir me lo decía en cada verso. Justamente hoy ya no siento rabia por el mundo más que una conformidad infinita de que todos apestan y que yo con poemas no voy a cambiar esta basura. Mi fin como poeta terminó, qué loco no ?

Y qué triste cuando no tienes nada para escribir. Ese vacío del poeta es más doloroso que el vacío existencial. 

Sí, se me secaron los versos, murieron mis ganas de expresar algún tipo de sentimiento ambiguo. Dejé de ser poeta cuando dejé de estar triste. Tal parece que en noches de soledad mis dolores eran como la llave para abrir esa puerta a los poemas. Sí, dejé de ser poeta 

Luzco tan solo como mi ciudad en las noches, sin luces, sin el aire del mar que brinde una pizca de amor al cielo. Luzco tan solo como un cementerio de la guerra, siempre luzco tan solo que la soledad la llevo en las arterias abarrotadas de lágrimas 

Luzco tan solo 

Cuando muera una noche de algún sábado quiero que reciten  mis poemas del libro " últimos versos de un poeta fracasado"

Necesito mi marihuana 

Hey hey mamá, espera, ahora como, déjame terminar. Jefe, ahora hago el trabajo, déjame terminar este verso. Maldita puta, no la chupes ahora que tengo que escribir lo que siento