Los sueños nacen en una tierra imaginada, pero crecen y se concretan en la tierra de la realidad. Por eso, nunca me agotaré de abrazar nuevos amigos que juntos formaremos la alianza de los sueños.
Muchas veces me han abatido, subestimado, lastimado pero no me cansaré de que mis sueños se emanen por muchas personas. Gracias por el cariño que me dan, estoy muy feliz del camino emprendido.