Cada ves que lo miraba a los ojos sentía que mi corazón se aceleraba de la manera más hermosa que existía, el lo sabía, yo lo sabía. Un día fue a dejarme a mi casa, casual de cualquier cosa entre amigos, pasamos por su hermano, y caminamos haciendo chistes como cualquier otro día, cuando el estaba por dejarme, me abrazó fuerte junto a su pecho, luego me miró a los ojos y me robó un beso, no sabía que hacer, estaba paralizada de alegría, y como muchas cosas que ignoraba, ese era el inicio de nuestra historia de amor, un lazo más allá de lo que pude pensar, y cada momento fue perfecto, hasta que , el instante se consumió, así como un fuego que arrasa con bosques enteros y después se apaga, así, sin heridos, sin que nadie lo supiera, el fuego se apagó, aunque nuestra amistad seguía, mi corazón se seguía acelerando cada ves que lo veía, hasta que un buen día en su casa, del fuego extinto comenzó otra ves una llama, más baja que la primera ves un beso igual de sincero, hasta que un día me miró a los ojos, sabía que tenía algo, fu entonces cuando me lo dijeron, ni siquiera el, me dijeron que se había enamorado de nuevo, que otra ves estaba encendiendo una chispa, y que esa chispa llevaba 2 semanas encendida, fue entonces cuando me di cuenta de que el beso no había sido honesto, que yo era la otra chica, y que el me había besado osadamente a costas de que tenía novia otra ves, ahora, el y yo tenemos caminos separados, y aunque es mi amigo, me siento traicionada y distante, y aunque el y yo ahora tengamos caminos separados con otras personas, siento que algún día nuestros caminos se van a volver a unir, pero esta ves, no como un simple incendio si no, como una llama que consumirá al mundo .