"Fue de este modo que, mientras el otro se aproximaba para agredirla con un cuchillo y llamar a los guardias, el hombre interrumpió rièndose interrumpió -La pobre sólo estaba mirando... -señaló a la aterrorizada jóven, quién desde arriba miraba absorta, abrumada por la angustia, llevándose las manos al pecho, jurando salirsele del pecho el corazón. -Yo digo digo que si quiere ver que vea, Lachmount. - desde abajo ella vió cómo el último a ella con cuchillo en mano se acercó, armados y desnudos los dos, observó de mejor manera el grosor de las piernas de los dos hasta el vientre y así cómo la anchura de los hombros de los dos, así cómo la forma en la que caían por los hombros los cabellos de los dos, uno con el pelo más largo en apariencia que el otro; Lachmount no tenía vello, lampiño cómo los suyos de nacimiento, sin embargo, Yiarlon le siguió pareciendo demasiado bello para ser humano, para sus adentros pensó cuándo con la altiva sonrisa del vanidoso príncipe se topó, que luego se relajó, luego volteó a ver al hijo del mariscal; más alto y delgado que el anterior, quién al principio la vió con repulsión, un poco pertinaz, tanto él y ella comprendieron su lugar en tan incómoda situación... - Oh, querida.. si queríais unirtenos sólo os lo hubieras pedido... Ahora.. -No obstante, los ojos de la doncella se desviaron al filo del sable que el menor portaba y temió...
-Yo... -Y nerviosa titubeó... Y en un pestañeo, sintió cómo con el arma su oreja el humano le rozó, ella sangró...
-Quièn primero, decidid ahora... "
//Próximamente en Sangre y Acero... Fortaleza de jacintos... 30%, en proceso//