Unas (no tan) pequeñas reflexiones que tuve después de escribir Ghost Stories.
Primero que nada aclarar que la historia es un songfic, y que la mayoría de los diálogos salen de la canción. Es una canción que escucho desde los quince años y es una de mis favoritas desde entonces, la he escuchado tantas veces y analizado tanto su letra que era la canción perfecta para cuando me invitaron a participar del #SONGFESTBAJIFUYU.
Es una canción triste narrada desde la perspectiva de a quién su pareja le pregunta “¿Por qué me amas?” ya en sí me parece una premisa interesante, como la letra nos muestra que no hay una respuesta correcta ni satisfactoria y eso me parece alucinante, porque creo que la mayoría respondería cosas cursis y trilladas, pero es una canción sincera y llena de angustia y dudas, con un ritmo que va escalando en la desesperación de no encontrar una respuesta, con miedo de sus propias palabras, al final NO HAY UNA RESPUESTA SATISFACTORIA y eso es aún mejor, o peor, como quieran verlo, en mi historia Baji y Chifuyu son tan solo dos adolescentes aprendiendo a amar, llenos de ilusiones y cosas que aprender, en un camino sin marcar y al final siento esta historia tan solo como una pequeña parte de un mosaico enorme de lo que yo tengo en la cabeza del Bajifuyu, y espero también esta historia forme parte del imaginario de las personas que hayan leído esto, al final uno escribe para que los otros lean, para compartir lo que forma parte de uno.
Baji ama a Chifuyu, pero es un amor agridulce, Baji no es una mala persona ni el villano en esta historia (siendo completamente sincero, en ninguna de mis historias está pensado que lo sea) solo es naturalmente sincero y a veces le cuesta entender los sentimientos de los demás, llega a ser cruelmente sincero sin intención.
La historia tiene un ambiguo final “feliz”. Los finales felices nunca fueron mi especialidad, pero por primera vez siento que es un final de acuerdo con el desarrollo de la historia.
*Continua